• El líder norcoreano visita la fábrica de tractores Kumsong en Nampo, al oeste de Corea del Norte, 15 de noviembre de 2017.
Publicada: lunes, 20 de noviembre de 2017 9:39
Actualizada: lunes, 20 de noviembre de 2017 15:12

Corea del Sur ha alertado este lunes que Corea del Norte puede realizar una prueba nuclear en cualquier momento a gusto del líder norcoreano, Kim Jong-un.

Se trata de una advertencia lanzada por el Servicio de Inteligencia Nacional (NIS, por sus siglas en inglés) aunque ha agregado que no se han detectado señales de otro ensayo nuclear inmediato en el recinto nuclear norcoreano de Punggye-ri.

Durante una sesión informativa ante el comité de inteligencia de la Asamblea Nacional, esta agencia de espionaje ha asegurado que está supervisando de cerca la posibilidad de que los norcoreanos desarrollen un misil balístico dentro de este año.

Al mismo tiempo, el NIS ha anunciado que “se ha detectado un movimiento activo de vehículos en una instalación de investigación de misiles en Corea del Norte y parece que el Norte ha llevado a cabo la prueba de un motor”.

El NIS indicó también que el vicepresidente del gobernante Partido de los Trabajadores de Corea del Norte, Choe Ryong-hae, llevó a cabo una rara inspección al Buró de Política General de su Ejército; primera vez en veinte años.

Se ha detectado un movimiento activo de vehículos en una instalación de investigación de misiles en Corea del Norte y parece que el Norte ha llevado a cabo la prueba de un motor”, anuncia el Servicio de Inteligencia Nacional (NIS, en inglés).

 

El mencionado Buró se trata de una de las instituciones militares más influyentes de Corea del Norte, ya que dirige la gestión del personal crucial de otros organismos militares, como el Ministerio de las Fuerzas Armadas Populares.

El informe del NIS añade, asimismo, que el objetivo de la supervisión de Choe al Buró, quien lo dirigió anteriormente, fue castigar al jefe y subjefe del mismo, Hwang Pyong-so y Kim Won-hong, respectivamente, por su “actitud impura”.

El documento informa también que Pyongyang se ha estado centrando en anticiparse al posible impacto negativo del endurecimiento de las sanciones aprobadas por el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (CSNU) en el sentimiento público.

La tensión en la península coreana ha crecido de forma sin precedentes por las pruebas nucleares de Corea del Norte, justificándolas como una vía para hacer frente mejor a la política hostil de Estados Unidos hacia la nación asiática.

Washington, Seúl y Tokio realizan de vez en cuando unos ejercicios militares cerca de la península para preparase, a su juicio, ante la amenaza norcoreana. No obstante, estas mismas actividades militares son una de las razones por las que Pyongyang insiste en llevar a cabo ensayos nucleares y misilísticos para “autodefensa”.

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