Danilo Rueda, titular de la Oficina del Alto Comisionado para la Paz (OACP), confirmó el miércoles que varios grupos armados tomaron la decisión unilateral de decretar un alto el fuego, en un gesto de voluntad hacia el diálogo de paz o de sometimiento a la justicia.
“Cada grupo, con su propia identidad, está expresando su disposición para ser parte de la paz total. En esta parte de la exploración se les ha pedido no matar, no desaparecer, no torturar”, indicó Rueda, quien asesora al Ejecutivo en la celebración de acuerdos de paz y en la reintegración de grupos armados al margen de la ley.
En esta fase se exploran eventuales diálogos de paz o de sometimiento a la justicia. “El propósito de la paz total es tratar de generar respuestas a esas demandas de paz. Ya lo están haciendo, lo han hecho público y lo han enviado”, enfatizó Rueda.
Uno de los grupos que, según el comisionado, ya empezó un cese unilateral al fuego, es el de la estructura criminal de las denominadas disidencias de la antigua guerrilla FARC, Estado Mayor de alias Iván Mordisco y la Segunda Marquetalia. También se han sumado algunas oficinas (bandas dedicadas al sicariato), las Autodefensas de la Sierra Nevada, el Clan del Golfo, entre otros.
Una de las primeras iniciativas de Gustavo Petro, tras investirse como presidente en agosto pasado, es la búsqueda de la “paz total”, acogiendo a disidentes guerrilleros, bandas narcotraficantes y grupos subversivos y paramilitares, entre otros actores que operan fuera de la ley.
El Gobierno de Petro formalizó a mediados de agosto la mesa de diálogo con el grupo guerrillero Ejército de Liberación Nacional (ELN).
El Gobierno colombiano firmó un acuerdo de paz con la FARC, pero la falta de implementación del pacto durante la gestión de Iván Duque hizo disparar la violencia en el país.
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