"Treinta expresidentes apoyan al Almagro de la dominación y no a pueblos en liberación", escribió el jefe de Estado boliviano en su cuenta de Twitter.
El viernes, al menos 30 exmandatarios de 14 países de América Latina y España, agrupados en la Iniciativa Democrática de España y las Américas (IDEA), expresaron su beneplácito con la actuación del secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA) respecto a la crisis que atraviesa Venezuela y manifestaron su esperanza de que la reunión del próximo 23 de junio del Consejo Permanente del ente sirva para comenzar a "reinstaurar el orden democrático en Venezuela".
Treinta expresidentes apoyan al Almagro de la dominación y no a pueblos en liberación", escribió el jefe de Estado boliviano, Evo Morales, en su cuenta de Twitter
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A fines de mayo, Almagro activó la Carta Democrática Interamericana para Venezuela, alegando que en el país bolivariano se estaba produciendo una ruptura del "orden democrático" que podría devenir en una situación de "ilegitimidad" si no se remedia.
Caracas rechaza la medida y afirma que el apoyo del secretario general de la OEA a la derecha venezolana en sus intentos de realizar un referendo que ponga fin al mandato de Maduro, se traduce en el respaldo a un golpe de Estado.
Esta semana, el mandatario boliviano envió varios tuits a favor del Gobierno venezolano. En uno de estos, a título personal, que si la OEA continúa al servicio de EE.UU., Bolivia evaluaría su salida de ese organismo e invitó a los gobiernos de la región a no ser instrumento del intervencionismo del "imperio" (así llama a Estados Unidos) en América Latina. Asimismo, comparó a Almagro con el conquistador español Diego de Almagro (1475-1538).
Pese a la postura del excanciller uruguayo al frente de la OEA, el ente hemisférico en su 46 Asamblea General recalcó el jueves su "apoyo histórico" a Venezuela contra los planteamientos injerencistas del Almagro.
Analistas políticos y el propio Gobierno venezolano consideran que Almagro, en realidad secunda una estrategia diseñada por la "comunidad de inteligencia" de Estados Unidos contra los gobiernos progresistas de la región.
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