• Protesta de chiíes en la ciudad de Al-Qatif, este de Arabia Saudí, para pedir la liberación del sheij Baqer Nimr al-Nimr, quien fue ejecutado posteriormente.
Publicada: jueves, 13 de julio de 2017 2:12

Arabia Saudí está empleando la pena de muerte como un ‘arma política’ para silenciar a los chiíes, indica Amnistía Internacional en un nuevo informe.

“Estas ejecuciones brutales son el último acto en curso de las autoridades saudíes en la persecución de la minoría chií. La pena de muerte se está empleando como un arma política para castigarlos por atreverse a protestar contra su trato y obligar a otros a callarse”, aseguró el miércoles el director de investigación de la ONG, Lynn Maalouf.

Maalouf escribió el informe en reacción al hecho de que el régimen saudí ejecutara el martes a cuatro chiíes en la provincia de Al-Sharqiya, acusándoles de perpetrar actividades terroristas.

Asimismo, urgió a la comunidad internacional a “combatir firmemente” a Arabia Saudí para asegurarse de que otros chiíes, que pueden ser ejecutados, no corran el mismo destino de los ejecutados anteriormente. Riad “debe anular sus condenas de muerte y establecer una moratoria oficial sobre las ejecuciones”.

Estas ejecuciones brutales son el último acto en curso de las autoridades saudíes en la persecución de la minoría chií. La pena de muerte se está empleando como una arma política para castigarlos por atreverse a protestar contra su trato y obligar a otros a callarse”, asegura el director de investigación de Amnistía Internacional, Lynn Maalouf.

 

AI además hizo alusión a otros 34 casos, en los que hombres chiíes fueron condenados a muerte, en su mayoría a raíz de juicios injustos basados principalmente en confesiones obtenidas mediante tortura.

De acuerdo con la ONG, a través de las mencionadas brutales medidas, Riad busca silenciar las manifestaciones en la región de Al-Qatif, en la provincia saudí de Al-Sharqiya —dominada por los chiíes—, en protesta por la marginación de la monarquía saudí y para pedir reformas, libertad de expresión, la puesta en libertad de los prisioneros, y el fin de la discriminación religiosa y económica contra Al-Qatif.

No es la primera vez que AI arremete contra las ejecuciones llevadas a cabo por Arabia Saudí. Ya con anterioridad la ONG había advertido, en reiteradas ocasiones, de las violentas actuaciones de Riad.

El caso más destacado de las ejecuciones del régimen de Al Saud contra los chiíes podría ser cuando a principios de 2016 el país árabe anunció que la ejecución del prominente clérigo chií, el sheij Baqer Nimr al-Nimr, y de otras 46 personas, todos ellos, por cargos de “terrorismo”.

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