El ministro de Exteriores del Gobierno de Salvación Nacional de Yemen, Hesham Sharaf, envió el viernes un mensaje de felicitación a su homólogo iraní, Hosein Amir Abdolahian, por la victoria de la Revolución Islámica de Irán (1979).
A su vez, el presidente del Parlamento yemení, Yahya Ali al-Rai, saludó a su par iraní, Mohamad Baqer Qalibaf, por el evento histórico y expresó su esperanza de que las relaciones entre los dos países hermanos siga aumentando.
Varios responsables de alto rango yemeníes asistieron el viernes a una ceremonia en la embajada de la República Islámica de Irán en Saná, capital de Yemen, para celebrar la gran fiesta nacional iraní.
En el evento, Mohamed Saleh Al-Nuaimi, miembro del Consejo Político Supremo de Yemen, calificó de “única” la Revolución Islámica por haber frustrado todos los complots internacionales urdidos por sus enemigos y conseguir enormes logros en muchos sectores, incluidos la producción y la industria.
Al-Nuaimi llamó a la nación yemení a utilizar la experiencia de la nación iraní y la Revolución Islámica para hacer frente a los agresores a Yemen.
La República Islámica de Irán ha objetado siempre la agresión llevada a cabo por la llamada coalición árabe, liderada por Arabia Saudí, a Yemen desde marzo de 2015, y ha insistido en que la vía política constituye la única solución para lograr el fin de la crisis en el empobrecido país árabe, al tiempo que pide un alto el fuego y diálogos entre las partes involucradas en la contienda.
La agresión y el bloqueo del reino árabe y sus aliados han convertido a Yemen en un “infierno”, lo que ha creado la peor crisis humanitaria del reciente siglo, según las Naciones Unidas.
Con todo, el Ejército y los comités populares de Yemen han prometido seguir luchando hasta liberar todo el país.
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