“Ninguna negociación israelí puede poner fin a la causa de Palestina. Israel sigue siendo el primer enemigo del pueblo islámico”, enfatizó el portavoz de Ansarolá, Muhamad Abdulsalam, en una entrevista concedida el martes a la cadena yemení estatal de televisión Al-Masirah.
Insistió asimismo en que Palestina no es negociable y, al recalcar que quienquiera que esté con el pueblo palestino debe pagar el precio, señaló que una de las razones de la agresión saudí contra Yemen es la postura independiente de este país sobre los asuntos del mundo islámico, incluida la causa palestina.
La guerra en Yemen, Irak y Siria, así como el asesinato del teniente general Qasem Soleimani, el comandante de la Fuerza Quds del Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica (CGRI) de Irán, y las sanciones contra el país persa, son medidas tomadas por las actitudes honorables del Eje de la Resistencia ante los problemas del mundo islámico, explicó Abdulsalam.
Por otro lado, el vocero de Ansarolá sostuvo que está claro y evidente que la inteligencia israelí desempeña un rol en las redadas y dando apoyo logístico a Arabia Saudí y sus aliados para agredir a Yemen, el país más pobre del mundo árabe.
Asimismo, Abdulsalam hizo alusión a la tregua anunciada por Arabia Saudí el pasado abril supuestamente para apoyar los esfuerzos de las Naciones Unidas encaminados a acabar con la guerra en Yemen y evitar la propagación del nuevo coronavirus, causante de la COVID-19 en este país devastado por el conflicto.
Este cese el fuego, para el vocero de Ansarolá, en realidad es “una mentira” de la monarquía saudí y una treta para recuperar su posición debilitada debido a los fracasos en la comunidad internacional.
“No rechazamos la paz honorable. Si ofrecen una paz que se traduzca en detener la agresión liderada por Arabia Saudí y levantar el asedio (contra Yemen), entonces estamos listos para la paz”, puntualizó.
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