“Hemos logrado la intención de compra por el orden de (...) 735 millones de dólares. Ya los tenemos en nuestras manos, en petros. Arrancamos por lo alto”, indicó Maduro en una rueda de prensa tras el inicio de una preventa privada que se extenderá hasta el 19 de marzo.
El criptoactivo venezolano podrá ser usado para adquirir bienes o servicios y será canjeable a través de casas de intercambio digitales por dinero fiduciario y otras monedas de este tipo, como el bitcóin.
Maduro hizo este anuncio horas después de haber lanzado oficialmente la criptomoneda venezolana, el petro, al mercado nacional e internacional, así como la emisión de los certificados para el ejercicio de la minería digital, lo que permite las transacciones financieras y comerciales.
El jefe de Estado también destacó que el “petro es una criptomoneda para el pueblo, que nos permitirá acceder a los productos que necesita Venezuela; saltándonos el cerco impuesto por el dólar” debido a las sanciones impuestas por EE.UU. contra el país suramericano.
El petro es una criptomoneda para el pueblo, que nos permitirá acceder a los productos que necesita Venezuela; saltándonos el cerco impuesto por el dólar”, ha explicado el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro.
En tan sólo 20hrs de su lanzamiento, el #Petro ha alcanzado una intención de de compra por un valor de 4.777 millones de yuanes, lo que equivale a 596 millones de euros o 753 millones de dólares, EMPEZANDITO PS! #Venezuela #N3320Feb #Criptomonedas #ElPetroEsVenezuela pic.twitter.com/Y0jUi37gvq
— Brigitte (@ChikPSUV) February 21, 2018
“Juntos es posible construir la historia. Estamos a la vanguardia tecnológica del mundo”, dijo el presidente tras ordenar la certificación de más de 5000 mineros que explotarán la criptomoneda en el país.
En el acto, el superintendente venezolano Carlos Vargas mostró la maquinaria de la minería digital y destacó que “estas máquinas son de fabricación china y que son ensambladas en Venezuela”.
El Libro Blanco (White Paper, en inglés) del petro estableció en 60 dólares el “precio de venta de referencia” de la moneda virtual, equivalente a la cotización del barril de crudo venezolano a mediados de enero, aunque aclaraba que estaría “sujeto a cambio”.
A mediados del pasado mes de enero, el Departamento del Tesoro de EE.UU. amenazó a los estadounidenses que deseen invertir en la criptodivisa venezolana con que “podrían exponerse a riesgos legales” e incluso ser perseguidos legalmente en virtud de las sanciones impuestas a Caracas.
Venezuela ha denunciado en reiteradas ocasiones ser blanco de una “guerra financiera mundial”: ofensiva que, a su juicio, es dirigida por el “imperialismo” estadounidense, que además de duros embargos, busca perjudicar a la empresa estatal Petróleos de Venezuela S.A. (PDVSA) y crear un “paro silencioso” en el sistema petrolero de este país.
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