Los refuerzos militares, incluidos armas avanzadas, municiones y material logístico, entraron en el territorio sirio el miércoles por la noche a través del cruce fronterizo Bab al-Salam de Tal Abyad y Bab al-Salama, junto a la ciudad de Azaz, en Alepo, y fueron trasladados a las posiciones que el Ejército turco mantiene ocupadas en el norte del país árabe, según ha informado este jueves el portal árabe Rai Alyoum.
Asimismo, otra caravana militar compuesta también por refuerzos cruzó la frontera turco-siria rumbo a los distritos meridionales de Tal Abyad, situada en Al-Raqa, agrega el informe citando a un comandante de las milicias kurdo-sirias, aliadas de Estados Unidos, a las que Turquía considera terroristas.
El informe llega pocas horas después de que el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, haya anunciado el comienzo de una nueva ofensiva militar en el norte de Siria, so pretexto de hacer frente a las milicias kurdas. La operación se realiza en el marco de su intención de crear una zona segura de 30 kilómetros de ancho en el norte de Siria, zona fronteriza con Turquía.
En esta misma línea, las fuerzas turcas atacaron el miércoles las posiciones de la coalición estadounidense en Siria por primera vez, situadas en el campo de Kobani, una ciudad de mayoría kurda al norte del país levantino.
Damasco condena los intentos “agresivos” de Turquía de crear una zona segura en el norte de Siria y dice que los complots separatistas benefician a Israel y Estados Unidos. Según las autoridades sirias, la principal razón que impulsa la escalada de tensiones en el norte del país es la “ocupación” de Ankara.
El Gobierno sirio considera ilegal la presencia militar de las tropas estadounidenses y turcas en el país y les acusa de dar apoyo a los terroristas afines y de robar los recursos naturales y activos públicos del país, por lo que exige su retirada inmediata.
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