Conforme ha informado la agencia estatal siria de noticias SANA, los terroristas afiliados a la división Al-Hamza, respaldada por Turquía y EE.UU., se han involucrado este jueves en “choques sangrientos internos” en las afueras de la ciudad de Ras Al-Ayn, en la provincia siria de Al-Hasaka.
Estos enfrentamientos han tenido lugar debido a las continuas luchas entre estas organizaciones “por compartir la influencia, los objetos robados y las rutas de contrabando”, así como apoderarse de las “casas de los ciudadanos sirios, por un lado, y sembrar el caos y la inseguridad en esas áreas por el otro”, ha detallado el informe.
“Los extremistas takfiríes han utilizado ametralladoras pesadas y armas semipesadas durante los choques, que han dejado varios muertos y heridos entre ellos”, ha subrayado SANA.
Turquía ha desplegado militares en las zonas norteñas de Siria, so pretexto de combatir a las milicias kurdas, a las que considera terroristas, mientras que algunos informes revelan la implicación de Ankara y sus milicias aliadas en el robo del petróleo sirio.
Esto mientras que el Gobierno de Siria, presidido por Bashar al-Asad, considera tales medidas de Turquía como una “violación de la soberanía y la integridad territorial sirias”, y ha urgido en varis ocasiones su retirada inmediata. De hecho, conforme a Damasco, Ankara y Washington son los primeros apoyadores de las agrupaciones terroristas que existen en estos momentos en el suelo sirio.
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