Un satélite de comunicaciones estadounidense Galaxy 11, con más de 20 años de antigüedad, se desintegró parcialmente mientras estaba en órbita, según el informe publicado el sábado por el Instituto Kéldysh de Matemática Aplicada, perteneciente a la Academia de Ciencias de Rusia.
En esta línea, el instituto científico ruso confirmó que los pedazos de Galaxy 11, fueron detectados y explorados mediante instrumentos ópticos civiles. Por lo tanto, detalló que los pequeños partes del aparato se consideran un peligro inmenso para otros satélites que aún funcionan en la misma órbita geoestacionaria.
Los científicos rusos explicaron que la destrucción del satélite espacial se debe a distintos factores, entre ellos el envejecimiento de la pantalla, aislamiento térmico al vacío del cuerpo, concentradores de radiación solar o paneles solares.
El Galaxy 11, fabricado por los estadounidenses, fue lanzado al espacio el 22 diciembre de 1999, a través del cohete europeo Ariane 4, que despegó desde el puerto espacial de Kouru (Guayana Francesa), para brindar servicios satelitales en el norte del continente americano.
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