En una nota emitida este sábado en su cuenta en Twitter, María Zajárova ha arremetido contra Zelenski por declarar que las fuerzas independentistas del Donbás han disparado contra los residentes de esta región, situada en el este de Ucrania y donde se asientan las repúblicas autoproclamadas de Donetsk y Lungansk.
“Solo un cínico desalmado puede hacer declaraciones del tipo que ‘disparan ellos mismos’ sobre los residentes de Donbás, tomando en cuenta el número de personas que han fallecido en las regiones de Donetsk y Lugansk en los últimos años”, ha denunciado Zajárova, sosteniendo que intenta “dejar las emociones a un lado” pero es “difícil” hacerlo en esta situación.
La funcionaria rusa ha indicado que la misión especial de monitoreo de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) que registra los disparos en la zona del conflicto “reporta que hay considerablemente más ataques de parte de las fuerzas controladas por Kiev”.
Los ataques con armamento pesado en el Donbás han continuado este sábado por tercera jornada consecutiva. Todo empezó tras los bombardeos de las fuerzas ucranianas contra las fuerzas de la república autoproclamada de Lugansk, cuyas autoridades han denunciado que estos ataques violan el alto el fuego estipulado en los acuerdos de Minsk, suscritos para poner fin al conflicto en la región de Donbás.
Debido a las hostilidades de Kiev, los ciudadanos de Donetsk y Lugansk se han refugiado en Rusia. De acuerdo con autoridades de Lugansk, al menos 6603 personas, entre ellas 2436 niños, ya han salido rumbo a Rusia. Además, reportes oficiales dan cuenta que 25 000 personas abandonaron la región.
Por su parte, el portavoz de las fuerzas de Donetsk, Oleg Nikitin, indicó el jueves que las fuerzas de esta república independentista tuvieron que abrir fuego de represalia para suprimir las armas del enemigo con el objetivo de proteger a los civiles.
Desde 2014, la región oriental de Ucrania es escenario de combates entre las fuerzas de Kiev y los independentistas prorrusos, e incidentes como los mencionados arriba se han repetido muchas veces. Sin embargo, la tensión se ha disparado con acusaciones mutuas entre Kiev y Moscú de movilización de tropas y preparativos para una posible ofensiva, todas rechazadas por Rusia.
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