“Apreciamos mucho que la asociación estratégica integral de coordinación entre Rusia y China, que entra en una nueva era, se haya alcanzado un nivel sin precedentes y se haya convertido en un modelo de eficiencia, responsabilidad y aspiración para el futuro”, ha elogiado el mandatario ruso, Vladimir Putin.
En un artículo publicado este jueves por la agencia china de noticias Xinhua, titulado como “Rusia y China: una asociación estratégica orientada al futuro”, el jefe de Estado ruso ha subrayado que los nexos entre Moscú y Pekín están basados en la igualdad, la consideración de los intereses de los demás, la libertad de las circunstancias políticas e ideológicas, así como de los vestigios del pasado.
Refiriéndose a su próxima visita a Pekín, capital china, que está prevista para el 4 de febrero, Putin ha puesto de relieve que se discutirá con su homólogo chino, Xi Jinping, los temas bilaterales, regionales y globales.
“Sin duda se prestará especial atención al desarrollo de los vínculos comerciales. […] Trabajando juntos, podemos lograr un crecimiento económico estable y mejorar el bienestar de nuestros ciudadanos, fortalecer nuestra competitividad y enfrentarnos juntos a los riesgos y desafíos actuales”, ha remarcado.
De acuerdo con el presidente del país euroasiático, los dos países tienen la capacidad de resolver con éxito los problemas de desarrollo a largo plazo, aprovechando sus importantes recursos financieros, industriales, tecnológicos y humanos.
Rusia y China se alinean cada vez más, en el medio de la escalada de las tensiones y competencias comerciales entre el gigante asiático y Estados Unidos, así como el deterioro de las relaciones Moscú-Washington.
De hecho, EE.UU. considera a Rusia y China como las principales amenazas, por lo tanto, la alianza que siguen fortaleciendo estos países en varias áreas, entre ellas en temas militares, genera más inquietud en el país norteamericano.
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