Con aplausos, los estudiantes recibieron al presidente de Irán, Hasan Rohani, a su llegada a la prestigiosa Universidad Industrial de Sharif en Teherán (capital).
Fue un espacio donde los representantes de los estudiantes hablaron directamente con su presidente, al que le hicieron llegar peticiones y presentaron sus críticas.
Un abanico de tendencias y visiones. No obstante, todos coincidían en la unidad entre diferentes puntos de vista políticos para solucionar los problemas del país. Críticas y visiones fueron respondidas más tarde por el presidente iraní.
Hasan Rohani recordó que la universidad es el mejor lugar para criticar al poder. El mandatario afirmó que las conversaciones con el mundo muestran que Irán nunca aboga por la guerra, si bien, siempre está preparado para defenderse.
El 7 de diciembre de 1953, mercenarios del régimen del sha de Irán, Mohamad Reza Pahlavi, incursionaron violentamente en la Universidad de Teherán y acabaron con la vida de tres estudiantes.
Protestaban contra la reanudación de las relaciones con el Reino Unido y el viaje del entonces vicepresidente de EE.UU., Richard Nixon, a Irán, tras el golpe de Estado organizado por la Agencia Central de Inteligencia de EE.UU. (CIA, por sus siglas en inglés) y el Servicio de Inteligencia Secreto británico (conocido como MI6), que derrocó el Gobierno del entonces primer ministro, Mohamad Mosadeq.
Han transcurrido más de seis décadas de la represión estudiantil por parte de las fuerzas de seguridad del sha, pero los iraníes siguen recordando este día como el día de la lucha contra el imperialismo y la arrogancia mundial.
Samaneh Kachui, Teherán.
xsh/hnb