Por su parte, la Autoridad Nacional Palestina (ANP) presentó detalles de crímenes de guerra que el régimen israelí está cometiendo en esta tercera Intifada palestina.
La Red de las Organizaciones No Gubernamentales (ONG) palestinas (PNGO, por sus siglas en inglés) presenta los últimos resultados de su estudio sobre cómo la agresión israelí de julio y agosto de 2014 todavía golpea la vida en la Franja de Gaza.
Temas como la salud, el trabajo, la educación, la protección de las mujeres y los niños o la reconstrucción, se observan desde una perspectiva en la que la única solución es acabar con el bloqueo y la ocupación israelí.
La Red señala que la agresión israelí de 2014 dejó a 1134 personas con discapacidades, entre ellos 180 niños. Hoy en día, alrededor de 360.000 niños siguen necesitando ayuda psicológica. Parte de la responsabilidad, dicen, debe asumirla la comunidad internacional porque el régimen israelí violó la ley de conflictos atacando a equipos médicos y ambulancias.
Pero las agresiones israelíes continúan. Con el estallido de la Tercera Intifada palestina, la Intifada de Al-Quds (Jerusalén), se repite el escenario: pasividad de la comunidad internacional y total libertad para los crímenes israelíes.
A finales del mes de octubre el ministro de Exteriores palestino, Riad al-Maliki, entregó a la fiscal de la Corte Penal Internacional (CPI) los detalles de los crímenes de guerra israelíes durante esta Tercera Intifada.
La continuación de los castigos colectivos que hace el régimen de Israel y la opresión insensata contra los civiles manifestantes, son, para las ONG y para los oficiales palestinos, un hecho adicional para rendir más cuentas ante la CPI.
Mussa'ab Bashir, Gaza.
aaf/anz/hnb