El presidente de Irán, Masud Pezeshkian, durante la ceremonia del Día del Ejército llevado a cabo junto al santuario del Imán Jomeini en Teherán (capital iraní), ha señalado que el Ejército es el símbolo de la dignidad de la comunidad, apoyo del liderazgo y el principal factor para garantizar la seguridad y la paz del país.
“Si este valioso poder no existiera, la seguridad y la paz desaparecerían de nuestra comunidad. La presencia del ejército y las fuerzas armadas es la que posibilita la estabilidad interna y la dignidad regional de la República Islámica de Irán”, ha subrayado el mandatario iraní.
Al resaltar la importancia del papel del “poderoso Ejército de la República Islámica de Irán”, Pezeshkian ha puesto de manifiesto que “con la presencia de estos honorables (fuerzas armadas), la República Islámica de Irán es reconocida en la región como una potencia indiscutible y puede ejercer sus posiciones con firmeza y desde una posición de poder en los diálogos, las interacciones y en la creación de paz y tranquilidad en la región”.
Tras considerar al Ejército de la República Islámica de Irán como un ejemplo incomparable de orden, cohesión y una estructura administrativa sana en el país, el jefe del Ejecutivo ha atribuido la estabilidad estructural del Ejército a la prudencia y dirección del Líder de la Revolución Islámica de Irán, el ayatolá Seyed Ali Jamenei.
“En los primeros días de la Revolución, los enemigos intentaron debilitar y destruir al Ejército para poder llevar a cabo sus conspiraciones, pero gracias a la resistencia y apoyo del Líder de la Revolución, el Ejército perduró y desempeñó un papel fundamental como un pilar firme durante la Defensa Sagrada (ocho años de guerra impuesta por el exrégimen baasista de Irak contra la nación iraní entre 1980 y 1988)”, ha recordado.
En este contexto, al hacer referencia al sacrificio del Ejército durante la guerra impuesta, el presidente ha recalcado que más de 48 000 mártires y decenas de miles de personas discapacitadas fueron ofrecidos por el Ejército en el camino de la defensa de la patria. “Este acto de sacrificio es un claro reflejo de la presencia efectiva del Ejército en todos los escenarios y frentes de defensa del país”, ha apuntado.
Pezeshkian ha catalogado los avances militares actuales de la República Islámica de Irán como el resultado de la lucha y autosuficiencia de las fuerzas Fuerzas Armadas, y ha precisado que hoy en día, Irán islámico ha alcanzado un nivel de poder en tierra, aire, mar, así como en los campos de drones y armamentos modernos, que el enemigo ni siquiera había imaginado.
El presidente, al enfatizar el papel del ejército en todos los sectores vitales del país, ha indicado que el Ejército y las fuerzas militares y de seguridad no solo han estado presentes en el ámbito defensivo, sino también en todas las crisis naturales y sociales, desde terremotos e inundaciones hasta tormentas y enfermedades.
Pezeshkian, agradeciendo la presencia ininterrumpida de las fuerzas armadas en todos los campos de servicio, ha calificado al Eejército como un apoyo invaluable para el gobierno y el pueblo, y ha señalado que esta presencia es un respaldo sólido para el país y un punto de apoyo confiable para el querido pueblo de Irán.
El mandatario iraní, al resaltar el papel disuasivo del Ejército frente a las amenazas del enemigo, ha afirmado que Este mismo espíritu desanima al enemigo, impidiéndole creer que pueda trazar algún plan efectivo contra esta nación o causar una disrupción en el poder nacional.
El jefe del Gobierno, al finalizar, ha expresado su agradecimiento a los comandantes de las Fuerzas Armadas y a todos aquellos que, con todo su fuerza, están comprometidos en la defensa de la tierra y el agua de la nación iraní.
“La seguridad y la dignidad de hoy de Irán Islámico son el fruto del esfuerzo y sacrificio de estos valientes; aquellos que estuvieron en el pasado, que están hoy y que también estarán presentes mañana en el campo de batalla”, ha concluido.
msr/hnb
