Rafael Grossi hizo la aclaración en el marco de la Cumbre sobre Cambio Climático en Bakú (capital de Azerbaiyán) el martes y expresó su esperanza de resolver los supuestos problemas de salvaguardias con los funcionarios iraníes durante su visita a Teherán.
“Esa es esta brecha, esta falta de confianza, que no debemos permitir que crezca hasta convertirse en una profecía autocumplida de utilizar las instalaciones nucleares como objetivos”, afirmó a los periodistas el titular de la AIEA, que visitará este miércoles y jueves Teherán, añadiendo que “tenemos un problema que debemos resolver”.
En respuesta a la pregunta de si el organismo está preocupado por el desarrollo de armas nucleares de Irán, aclaró que la AIEA no tiene pruebas para demostrar tal afirmación.
En una entrevista anterior con CNN, Grossi reiteró que el propósito de su viaje a Irán se centra en encontrar soluciones diplomáticas a los problemas restantes y añadió que, de hecho, esta visita no será la última,
Conforme a la agenda del viaje de Grossi, este se reunirá con el presidente de Irán, el ministro de Asuntos Exteriores y el jefe de la Organización de Energía Atómica de Irán (OEAI).
En referencia al futuro del acuerdo nuclear, de nombre oficial Plan Integral de Acción Conjunta (PIAC o JCPOA, por sus siglas en inglés), destacó que “no es un asunto secreto. Desde que el nuevo gobierno asumió el poder, está buscando soluciones a este respecto”, afirmó.
Hace dos semanas, el vicecanciller iraní para Asuntos Jurídicos e Internacionales, Kazem Qaribabadi, quien se reunió con el jefe de la AIEA en Viena (Austria), anunció que el viaje de Grossi será la continuación de las interacciones entre Irán y el Organismo, así como en línea con la declaración conjunta emitida por las dos partes el 4 de marzo de 2023 que también pidió resolver las cuestiones de salvaguardia restantes con un enfoque profesional y sin el sesgo del organismo.
Antes del acuerdo JCPOA, Occidente presentó el programa nuclear de Irán como una amenaza basándose en el capítulo 7 de la Carta de las Naciones Unidas y trató de securitizar y vincular su solución con acciones militares y sanciones.
La AIEA, en sus más de una docena de informes, ha verificado el cumplimiento por parte de Irán del acuerdo de 2015, pero el incumplimiento del JCPOA por parte del Reino Unido, Francia y Alemania, junto con los Estados Unidos, llevó a Teherán a reducir gradualmente sus compromisos.
El Plan Integral de Acción Conjunta se firmó en 2015 entre Irán y los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas (CSNU) y Alemania. El expresidente estadounidense Donald Trump se retiró ilegalmente del acuerdo en 2018.
Las conversaciones para salvar el JCPOA comenzaron en Viena, capital de Austria, en abril de 2021, con la intención de examinar la seriedad de Washington a la hora de reincorporarse al acuerdo y eliminar las sanciones contra Irán.
Irán ha rechazado en múltiples ocasiones las acusaciones de los países occidentales sobre su programa de energía nuclear y afirmado que el arma nuclear nunca ha formado parte de su doctrina defensiva.
Además, ha dejado claro a la AIEA que las dudas sobre las actividades nucleares de Irán que se refleja en los informes de esta agencia tienen su origen en los documentos falsos del régimen israelí, lo cual busca convertir el expediente nuclear de Irán en un asunto de seguridad.
ght/ncl/tmv