A través de su cuenta en X, el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Irán, Esmail Baqai, ha manifestado este viernes la solidaridad y apoyo de la República Islámica de Irán hacia el gobierno y pueblo cubanos en las “desafiantes condiciones económicas que atraviesan”.
Asimismo, se ha referido al apagón que afectó al menos cuatro días a todo el país caribeño. La República Islámica de Irán “expresa su alegría por el mejoramiento de la situación y la reconexión del Sistema Electroenergético Nacional en Cuba”, ha escrito el vocero iraní.
El martes, la compañía estatal Unión Eléctrica (UNE) informó que Cuba ha logrado completar la reconexión de todo el país al Sistema Eléctrico Nacional (SEN) cuatro días después del apagón total que sufrió la isla el viernes 18 de este mes.
Conforme Baqai, “el sufrimiento y las dificultades actuales del pueblo cubano son resultado directo de las sanciones ilegales y contrarias a los derechos humanos que Estados Unidos ha aplicado contra este país durante los últimos 66 años, lo cual que ha causado el deterioro y desgaste de las infraestructuras civiles y económicas de este país”.
El diplomático iraní ha señalado que es evidente la responsabilidad internacional de Washington por los efectos y consecuencias de las sanciones ilegales e injustificadas contra el pueblo de Cuba, las cuales violan gravemente algunos importantes derechos humanos fundamentales del pueblo cubano y, en numerosos casos, constituyen crimen de lesa humanidad, por lo que el país norteamericano “debe rendir cuentas”.
En efecto, la contingencia energética fue provocada por las afectaciones del suministro de combustible y los obstáculos a la adquisición de tecnologías e insumos necesarios para la modernización y funcionamiento de sus centrales de generación eléctrica, derivado de la política de sanciones impuestas por Washington.
Sin embargo, los apagones crónicos que limitan el desarrollo de las actividades productivas no es el único problema que enfrentan los cubanos, sino también la escasez de diversos productos, incluso medicinas.
Organizaciones de solidaridad, ciudadanos y gobiernos de todo el mundo, incluso cada año en la Asamblea General de las Naciones Unidas (AGNU), rechazan el cerco económico, financiero y comercial que Estados Unidos impone a Cuba.
De acuerdo con expertos, Washinton utiliza el bloqueo con el propósito de asfixiar al pueblo cubano y derrocar su orden constitucional.
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