Un tribunal superior de Argentina dictaminó la semana pasada que Irán fue el autor intelectual del atentado de 1994 contra la Asociación Mutual Israelí Argentina (AMIA) en Buenos Aires. También acusó al país persa del atentado de 1992 contra la embajada israelí en Buenos Aires.
El portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Irán, Naser Kanani, ha rechazado este miércoles dichos fallos y los ha catalogado de “infundados e indocumentados” y emitidos con “fines políticos”.
Conforme ha subrayado Kanani, desde la perspectiva de Irán, la participación del referido tribunal en el caso de la explosión del edificio de la AMIA y su sentencia final sobre los motivos y causas primarias de la explosión “es prematura y carece de sabiduría jurídico-judicial”.
De hecho, el funcionario persa ha argumentado que el fallo representa un intento de desviar el rumbo de la investigación para descubrir la verdad, ya que el caso sobre las explosiones se encuentra actualmente bajo revisión en otro tribunal.
“Esto indica la implementación de un nuevo proyecto político de los enemigos de la República Islámica de Irán y especialmente del régimen sionista”, ha avisado.
Kanani ha resaltado que, durante los últimos 30 años, Irán ha respaldado cualquier iniciativa constructiva para determinar la verdad detrás del incidente de AMIA, incluida la firma de un memorando de entendimiento con el gobierno argentino para establecer una comisión investigadora conjunta.
“Lamentablemente, las acciones antes mencionadas han quedado infructuosas y no han logrado resultado alguno debido a acciones de quienes no han buscado descubrir la verdad y siempre han sacrificado la ejecución de la justicia por sus objetivos políticos y partidistas dentro de Argentina”, ha afirmado.
En este sentido, tras llamar al gobierno y al sistema judicial argentinos a realizar esfuerzos mutuos para descubrir la verdad, ha advertido “contra cualquier acción antiraní perseguida por el régimen sionista”.
Para el vocero iraní, el régimen sionista, que ha sido fuertemente condenado a nivel mundial por la guerra contra Gaza y la atroz matanza de civiles, “intenta desviar la opinión pública de sus crímenes”.
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