Publicada: sábado, 7 de agosto de 2021 2:36

La alta cifra de delegaciones extranjeras en la investidura del presidente iraní muestra que Irán no es solo potencia regional, sino actor internacional clave.

Así lo cree el analista internacional Firas Alcharani, quien abordó la toma de posesión del nuevo presidente persa, Seyed Ebrahim Raisi, durante una entrevista concedida el jueves a HispanTV. A la ceremonia, celebrada la misma jornada, asistieron enviados de 73 países, además de representantes de organismos y bloques internacionales.

“Irán ya no es solamente una potencia regional”, sino que es un actor muy importante “en la lucha contra el imperialismo” que tiene también presencia en Latinoamérica, destacó el experto.

Conforme al entrevistado, Irán tiene una posición muy importante en el mundo que “no la ha ganado, gracias a las guerras, sino que gracias a su firmeza y gracias a su ayuda a los pueblos oprimidos, a la ayuda a la causa palestina y a la ayuda a Sudamérica, cuando en Venezuela necesitaban la ayuda por el embargo injusto dictado por un país imperialista que es EE.UU., Irán envió allí sus barcos”.

 

En respuesta a una pregunta sobre qué es lo más complejo para el nuevo mandatario persa durante los próximos cuatro años, Alcharani contestó que arreglar la economía del país persa, afectada por las sanciones injustas y unilaterales impuestas por Estados Unidos y la pandemia del nuevo coronavirus, causante de la COVID-19.

Aunque el experto se expresó optimista en cuanto a la mejora de la economía iraní durante el mandato de Raisi, advirtió que el Occidente, encabezado por EE.UU., intentará hacer todo lo posible para destruir la economía y desestabilizar el país y eso, “no para evitar supuestamente que Irán tenga un armamento nuclear”, sino para impedir que siga apoyando la causa palestina, según dijo.

Insistió en que la República Islámica tiene que impulsar la “economía de la resistencia”, potenciando sus relaciones con el Oriente, es decir con China y otras economías complementarias, y porque, a su juicio, “del Occidente no se puede esperar nada”.

En su discurso, tras jurar el cargo, Raisi prometió trabajar para mejorar la economía nacional, resolver los problemas de la gente y erradicar la corrupción, al tiempo que aseguró que preservará el interés de su pueblo: la independencia y la resistencia ante las exigencias arrogantes.

El exjuez, de 60 años, tomó el relevo de Hasan Rohani en un evento que contó la presencia de los titulares nacionales y 115 autoridades de 73 países. Será el octavo jefe del Ejecutivo y encabezará la 13.ª Administración de la República Islámica.

Fuente: HispanTV Noticias

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