Según un comunicado oficial de las fuerzas de guerra de Israel, divulgado este lunes, el cohete, diseñado por Elbit Systems para una gran precisión y un despliegue rápido, fue utilizado para causar una destrucción masiva en zonas densamente pobladas del sur de Gaza.
El informe revela que dichos cohetes fueron utilizados por el 282º Regimiento de Artillería para atacar las posiciones del Movimiento de Resistencia Islámica de Palestinas (HAMAS) y otros grupos de la Resistencia palestina.
El documento alega que el objetivo de usar dichos cohetes fue supuestamente minimizar las bajas civiles en el enclave palestino. Contrariamente a las alegaciones israelíes, el Ministerio de Salud de Gaza ha informado de más de una docena de muertos civiles y 37 heridos en las zonas afectadas, atribuyéndolos a los más recientes ataques israelíes en la zona.
El ejército de ocupación israelí también ha intensificado recientemente el uso de drones suicidas para atacar las tiendas y casas de las personas desplazadas.
Trevor Ball, investigador de municiones y ex especialista en desactivación de artefactos explosivos del Ejército estadounidense, revisó e identificó fotografías y vídeos de los restos de los drones.
“Los drones de ataque unidireccionales son efectivamente misiles, y bajo la mayoría de las definiciones técnicas se consideran misiles”, afirmó.
El ejército israelí ya ha utilizado tecnologías de vigilancia, inteligencia artificial (IA) y otras herramientas digitales para causar una destrucción masiva a gran escala en las zonas residenciales de la franja palestina asediada.
Desde el comienzo de la agresión, el ejército israelí también ha estado utilizando viejos vehículos blindados de transporte de personal (APC, por sus siglas en inglés) cargados con toneladas de explosivos para realizar operaciones preventivas en las llamadas zonas de combate antes de que entren las tropas.
El Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) afirma que los renovados ataques aéreos israelíes han desatado un nuevo infierno en la Franja de Gaza.
Según el Ministerio de Salud palestino, al menos 72 personas perdieron la vida en la Franja en las últimas 24 horas. Los nuevos decesos han elevado el número de muertos por la guerra genocida israelí, iniciada desde octubre de 2023, a más de 52 310 palestinos. Casi 117 800 personas más han resultado heridas.
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