Tres hospitales en el norte de la Franja de Gaza, que intentan mantenerse operativos, se han convertido en el epicentro de una crisis humanitaria. Médicos y enfermeras tratan a palestinos gravemente heridos bajo el constante asedio de los tanques israelíes, que rodean y bombardean sus instalaciones, según reportan las autoridades sanitarias.
Muhammad Zaqout, director general de hospitales de Gaza, señaló en una declaración el sábado que las fuerzas del régimen están llevando a cabo ataques intencionados contra hospitales en el norte de la Franja de Gaza, lo que está exacerbando aún más la crisis humanitaria en la región.
Zaqout denunció que Israel ha bloqueado la entrada de medicamentos, alimentos y combustible al norte de Gaza. “Hacemos un llamamiento para que cese la agresión contra la población del norte de Gaza y se garantice la protección necesaria para los hospitales y el personal médico”, agregó.
Además, informó que la mañana del sábado se estableció un cerco militar alrededor del Hospital Indonesio, seguido de intensos bombardeos.
El director del centro, Marwan Sultan, manifestó en un comunicado que las fuerzas militares israelíes han cercado por completo el hospital, interrumpido el suministro eléctrico y lanzado bombardeos indiscriminados, enfocando su artillería en los pisos dos y tres del edificio.
Sultan añadió que “existen graves riesgos para el personal médico y los pacientes”.
Por su parte, el Ministerio de Salud de Gaza informó en un comunicado que las fuerzas israelíes habían realizado ataques aéreos sobre los pisos superiores del hospital, donde había más de 40 pacientes y heridos, además del valiente personal médico presente.
Asimismo, informó que “intensos estallidos resonaron en el hospital y su jardín, generando un clima de terror absoluto entre los pacientes y los trabajadores”.
De acuerdo con el informe del Ministerio, los tres hospitales más importantes del norte de Gaza han quedado fuera de operación.
El viernes, la Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) lanzó una alerta sobre la agravante crisis humanitaria en el norte de Gaza, describiéndola como “cada vez más crítica y amenazante”. Añadió que “las familias intentan sobrevivir en condiciones atroces, bajo intensos bombardeos”.
Representantes del sector salud indicaron también que las fuerzas armadas israelíes están presionando al personal médico para que desaloje los hospitales ubicados en el norte de Gaza.
Las víctimas continúan aumentando
Las autoridades sanitarias locales confirmaron que el número de palestinos muertos a causa de la ofensiva israelí desde el 7 de octubre de 2023 ha aumentado a 42 519 víctimas mortales, además de otras 99 637 personas heridas. La mayoría de las víctimas son mujeres y niños.
Según las mismas fuentes, los servicios de emergencia aún no pueden acceder a muchas víctimas y cadáveres atrapados bajo los escombros o esparcidos por las carreteras del enclave devastado por la guerra, mientras las fuerzas de ocupación israelíes continúan obstruyendo el movimiento de las ambulancias y los equipos de defensa civil.
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