En una entrevista concedida hoy miércoles a la cadena catarí Al Jazeera, Ghazi Hamad, miembro de la oficina política de HAMAS, ha reaccionado a las declaraciones del secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, sobre la eliminación de la Resistencia de Palestino en el futuro de la Franja de Gaza tras el fin de la guerra.
“La posición de Estados Unidos de que HAMAS no tiene lugar en el futuro de la Franja de Gaza muestra su incapacidad para conseguir logros en el campo. HAMAS es ahora una poderosa fuerza política y militar que determina el curso de los acontecimientos”, ha resaltado.
Hamad ha denunciado que Estados Unidos e Israel están tratando de reorganizar la situación en Gaza, si bien no han logrado nada, excepto la matanza de civiles y la destrucción de hospitales e instalaciones civiles de la zona.
Al respecto, ha aseverado que Washington y el régimen de Tel Aviv están perdiendo todos los días sus credibilidad, soldados y vehículos militares en Gaza, y no lograrán recuperar su credibilidad perdida.
“Reorganizar la situación en Gaza es una cuestión completamente palestina, y HAMAS será parte de esta ecuación a pesar de la voluntad de Washington y Tel Aviv, pues es parte del tejido nacional que hoy está al lado de la Resistencia para crear un país y rechazar la ocupación”, ha apostillado.
Blinken, durante su participación en una reunión de cancilleres del Grupo de Siete (G7) Tokio (capital japonesa), ha declarado este miércoles que Gaza no puede seguir siendo dirigida por HAMAS, ya que eso simplemente invita a que se repita lo del 7 de octubre.
Sus comentarios se producen un día después de que el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, señalara que Tel Aviv encargaría la responsabilidad general de la seguridad de Gaza después de la guerra.
Hace tres días, el ministro de asuntos militares del régimen israelí, Yoav Galant, anunció, por su parte, los tres objetivos principales que Tel Aviv busca de la guerra contra Gaza: Eliminar a HAMAS como una organización militar y gubernamental en Gaza, impedir cualquier amenaza de seguridad desde Gaza contra los ciudadanos israelíes, y finalmente otorgar plena libertad de acción al ejército israelí para el uso de fuerza.
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