La llamada administración civil de Israel dio el miércoles la luz verde para 31 proyectos de construcción en asentamientos, incluidos un centro comercial, una escuela de necesidades especiales, y una serie de proyectos de infraestructura y cambios de zonificación en los asentamientos existentes en Cisjordania, reportan medios israelíes.
No obstante, el consejo de Yesha, principal grupo de defensa de centenares de miles de colonos israelíes en la Cisjordania ocupada, exigió la construcción de viviendas de asentamientos en Cisjordania y no solo proyectos de construcción pública.
“Llevamos medio año esperando la aprobación de las viviendas y aún no ha sucedido […] El comité de construcción debe reunirse de inmediato para aprobar la construcción de unidades de vivienda en toda la región. Hemos esperado lo suficiente”, comunicó el consejo de Yesha.
Se trata de la primera medida de tal índole adoptada por el nuevo gabinete israelí con Naftali Bennett como el primer ministro.
Ya el martes, el ministro de relaciones exteriores de Israel y futuro primer ministro a partir de 2023, Yair Lapid, reveló que el gabinete planeaba desmantelar el puesto de avanzada ilegal de Evyatar, en Cisjordania, cumpliendo así con una decisión del ejército.
Bennett juramentó como premier a mediados del mes en curso de junio, desalojando del poder a Benjamín Netanyahu.
Líderes israelíes opositores a Netanyahu, nada más acordar formar el 4 de junio el gabinete de coalición, anunciaron que no congelarían la expansión de asentamientos ilegales en los territorios ocupados palestinos.
Asimismo, el régimen de Tel Aviv sigue, bajo mandato de Bennett, agrediendo la Franja de Gaza y cometiendo atrocidades en Al-Quds (Jerusalén) y la Mezquita Al-Aqsa.
La Resistencia palestina denuncia, sin embargo, que el nuevo gabinete israelí busca promocionarse a través de dichos “movimientos acrobáticos”, advirtiendo que si los israelíes continúan con estas provocaciones, “pagarán un alto precio”.
Palestina descarta que la llegada de la coalición israelí al poder persiga un cambio verdadero, dadas las políticas agresivas que comparten Netanyahu y Bennett.
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