Publicada: jueves, 30 de julio de 2015 11:41
Actualizada: martes, 26 de abril de 2016 3:20

¿Por qué ahora Ankara realizó tales ataques? ¿O por qué ha cambiado su postura ante el conflicto armado en Siria después de que en los últimos años Turquía ha brindado todo tipo de ayudas a los grupos terroristas que operan contra el Gobierno de Damasco?

Unos días después de que un atentado terrorista se registró contra un mitin kurda en la ciudad turca de Suruç, fronteriza con Siria, en el cual murieron 32 personas y más de 100 resultaron heridos, los aviones de guerra de la Fuerza Aérea de Turquía atacaron por primera vez blancos del grupo takfirí EIIL (Daesh, en árabe) en el interior de los territorios sirios. 

Para responder a estas preguntas necesitamos considerar los rumores surgidas sobre la conversación telefónica del presidente de EE.UU., con su homólogo turco Recep Tayyip Erdogan para convencer a Turquía unirse a la llamada coalición anti-EIIL, liderada por Washington y formada por más de 60 países.

Tras esta conversación según indicaron medios locales turcas, el Gobierno de Ankara autorizó a EE.UU. utilizar la base aérea de Incirlik, en el sur del país, para llevar a cabo operaciones contra elementos del EIIL en Siria e Irak o tal vez atacar a Damasco en un futuro cercano. En cambio, EE.UU. acordó la creación de una zona de exclusión aérea a unos 90 kilómetros a lo largo de la frontera entre Turquía y Siria y una zona de entre 40 y 50 kilómetros hacia el interior del territorio sirio, entre las ciudades de Marea y Yarabulus. Esta zona equivale a casi medio del espacio de El Líbano (10453 kilómetros cuadrados).

Estas medidas representan peligros para el Gobierno turco: el primero es el periodo en el que Turquía decidió atacar al EIIL, y el segundo es las consecuencias que podrían tener sus operaciones anti Daesh para la seguridad y la economía del país.

Además este acuerdo llega en un momento en que Turquía se encuentra en el borde de "sedición" sectaria y étnica, un periodo en el que el partido gobernante el Partido de la Justicia y el Desarrollo (AKP) perdió su poder después de que no logró en las elecciones legislativas la mayoría absoluta que tenía desde hace 13 años en el Parlamento.

Este revés electoral se debió principalmente a los apoyos que brindó el Gobierno de Ankara a los grupos takfiríes como EIIL para derrocar al Gobierno del presidente siria, Bashar al-Asad, en este respecto anteriormente medios de comunicación revelaron como Ankara facilitó el tránsito de elementos terroristas a los territorios sirios, así como divulgaron como Turquía compra el petróleo robado por el EIIL de los campos de crudo de Siria.

Después de que esta banda extremista se hizo con las partes norteñas de Irak, el 7 de agosto de 2014, el entonces Canciller y el actual el primer ministro turco, Ahmet Davutoglu, en una entrevista concedida al diario Raialyoum en vez de denunciar las atrocidades del EIIL que perpetró en Irak o calificar de terrorista a Daesh, cargó contra el ex premier iraquí Nuri al-Maliki del surgimiento de este grupo terrorista.

La incorporación de Turquía al coalición anti-EIIL, es un importante cambio estratégico ya que el país euroasiático comparte más de 900 kilómetros fronteras con Siria, desde donde está previsto que el Ejército turco lanza ataques contra la ciudad de Raqa, el principal feudo de Daesh en Siria y la ciudad norteña iraquí Mosul.

Washington insistió a utilizar de las experiencias del Ejército turco en la guerra de guerrillas ya que las fuerzas turcas durante los últimos 30 años liberaron varios combates contra los combatientes del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), una experiencia inexistente en la mayoría de los ejércitos de la región, tal vez por esa razón Estados Unidos ha ejercido mucha presión a Erdogan a unirse a la guerra contra al EIIL, para tomar ventaja de estas experiencias.

Miembros del PKK en Turquía, cerca de la frontera con Irak

      

Sin embargo, las autoridades turcas tenían miedo de los peligros del EIIL que podría representar para la seguridad y la estabilidad del país, ya que el servicio de Inteligencia de Turquía ha revelado que más de tres mil personas en este país están conectadas con Daesh, y que poseen armas y han recibido entrenamientos militares, y algunos de ellos celebraron el atentado contra los kurdos de Suruç. Estos elementos colgaron mensajes en redes sociales celebrando la muerte de los kurdos, afirmando que los kurdos son enemigos del EIIL y que buscan reconstruir la ciudad de Kobani.

Además Erdogan tiene el mismo pensamiento “suní” cuando hizo declaraciones sobre las 52 víctimas del atentado con coche bomba perpetrado en mayo de 2013 en la ciudad Reyhanli, afirmando que “los muertos son de nosotros y son suníes”. 

Resultado

El objetivo de la intervención de Turquía en Siria como indican muchos analistas es para atacar a los kurdos y detener sus avances en Siria, empero eso podría desestabilizar el país y dañar su industria turística que ingresa a Turquía más de $ 30 mil millones al año.

El Gobierno turco entró en una aventura muy peligrosa a la que antes trató evitarla, y cualquier resultado no satisfactorio, o incluso desastrosas, responsabiliza al Gobierno de Turquía por su incorporación a la llamada coalición anti-EIIL, debido a que no haya leído bien el plan de Estados Unidos en la región.

 mkh/msf

 Abd al-Bari Atwan es redactor jefe de Raialyoum, diario independiente árabe.