Representantes del Gobierno venezolano, a través de videoconferencia desde la Cancillería bolivariana, sostuvieron el miércoles una reunión de trabajo con un equipo del Gobierno iraní para abordar la pandemia del coronavirus, que ha infectado a más de 2,6 millones de personas en todo el planeta.
En la cita, la viceministra venezolana de Salud Integral, María Gabriela Miquilareno, junto al equipo de especialistas del Ministerio de Salud, intercambió experiencias, protocolos clínicos y medidas de prevención de la COVID-19 con el viceministro de Salud de Irán, Mohsen Asadi Lari.
Ambas partes trataron las medidas para impedir la propagación del virus letal, basadas en las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), y las políticas coercitivas unilaterales e ilegales del Gobierno estadounidense contra Teherán y Caracas.
El encuentro se celebró en cumplimiento con los acuerdos establecidos por los presidentes de Irán y Venezuela, Hasan Rohani y Nicolás Maduro, respectivamente, en su conversación telefónica del pasado 13 de abril.
En dicha llamada telefónica, el mandatario persa recalcó que Irán y Venezuela están resistiendo al imperialismo de EE.UU., que es “un virus más peligroso que el coronavirus”.
A su vez, Maduro expresó su solidaridad con el Gobierno y el pueblo iraní y elogió el éxito del país persa en la lucha contra el coronavirus. “Irán y Venezuela siempre han estado unidos en su lucha contra el imperialismo”, subrayó.
Mientras que el coronavirus sigue propagándose en el mundo, Washington insiste en seguir sus sanciones, por lo que ha recibido una ola de críticas a nivel internacional. Un grupo de 10 países, incluidos Venezuela e Irán, ha solicitado a la alta comisionada de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Michelle Bachelet, acciones urgentes para eliminar las sanciones de Washington.
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