En un intento para acabar con las protestas de los “chalecos amarillos”, el presidente galo, Emmanuel Macron, prometió el lunes subir el salario mínimo de los trabajadores, bajar los impuestos a los jubilados y a los trabajadores con salarios más bajos y, además, aseguró que no restablecería el impuesto sobre el patrimonio y que lucharía contra el fraude fiscal.
Las marchas que comenzaron el pasado 17 de noviembre en Francia a raíz del aumento del precio de combustible siguen en pleno apogeo, porque, según el analista Isaac Bigio, las concesiones del Gobierno han sido “pocas” y han llegado “muy tarde”.
“Macron provocó una ira popular con sus ajustes sociales […] Las concesiones que ha dado (Macron) son pocas y muy tardías”, explica Bigio en una entrevista concedida hoy a HispanTV, cuando se reporta el quinto sábado de movilizaciones callejeras de los “chalecos amarillos”.
[El presidente de Francia, Emmanuel] Macron provocó una ira popular con sus ajustes sociales […] Las concesiones que ha dado [Macron] son pocas y muy tardías”, explica el analista Isaac Bigio en alusión a las masivas protestas en Francia de los llamados “chalecos amarillos” contra las políticas del actual Gobierno.
Bigio destaca que ni las concesiones, ni “la militarización de muchas ciudades”, ni la represión policial más virulenta semana a semana, ni siquiera el atentado del martes pasado en la ciudad de Estrasburgo (noreste) —reivindicado por el grupo terrorista EIIL (Daesh, en árabe)— han podido frenar este movimientos social.
El movimiento de los llamados “chalecos amarillos”, según estima el experto, puede prender en otros países. “Es una chispa que va expandiendo por el continente europeo”, advierte.
La Policía francesa ha confirmado la detención de 4500 personas hasta el 10 de diciembre, con una cifra récord de 2000 detenciones solo en las protestas del pasado 8 de diciembre, en las que se reportaron, además, más de 320 heridos y daños extensos a la propiedad en varias ciudades.
Fuente: HispanTV Noticias
ask/rba/nii