“El hecho de que el 22 por ciento de las inspecciones a nivel mundial de la Agencia [Internacional de Energía Atómica (AIEA)] se ha realizado en Irán, muestra que, Irán tiene el programa nuclear más transparente entre los Estados miembros de la agencia (AIEA)”, ha destacado este jueves el representante permanente de Irán ante las organizaciones internacionales asentadas en Viena (Austria), Kazem Qaribabadi.
El responsable iraní, en su intervención en la reunión trimestral de la Junta de Gobernadores, ha apuntado que el amplio nivel de cooperación entre Irán y la AIEA no se ha logrado fácilmente y no debe permitirse que se vea simplemente socavado por los “intereses políticos miopes” de algunos países.
Del mismo modo, ha enfatizado que se espera que la agencia lleve a cabo su misión de manera “profesional, independiente, imparcial y libre de presiones o interferencias”.
Qaribabadi se ha referido a la inmensa presión ejercida por Estados Unidos y el régimen de Israel sobre la agencia para que intente encontrar fallas en el trabajo nuclear de la República Islámica, criticando que bajo la presión del régimen israelí, la agencia citó “preocupaciones” a principios de este año sobre dos sitios en Irán.
Irán primero negó el acceso a los sitios, argumentando que la supuesta información proporcionada a la AIEA había sido preparada por la agencia de espionaje de Israel. Sin embargo, Teherán permitió posteriormente el acceso a los sitios de forma puramente voluntaria y para honrar su cooperación con el organismo.
“Para mantener la integridad de la Agencia, sus miembros deben evitar seriamente ejercer presión alguna sobre la agencia”, ha puesto de relieve.
Puesto que, ha agregado, un puñado de enemigos del acuerdo nuclear, de nombre oficial el Plan Integral de Acción Conjunta (PIAC o JCPOA, por sus siglas en inglés), no han encontrado ningún problema para destruirlo, han tratado de lanzar acusaciones “infundadas”.
En este sentido, el representante iraní ha instado a la agencia y a su Junta de Gobernadores a evitar caer en estos complots.
En mayo de 2018, Estados Unidos, bajo presión de su principal aliado, el régimen israelí, abandonó el pacto nuclear, firmado en 2015, con Teherán. Luego, reimpuso las sanciones que fueron levantadas por el acuerdo, sin eximir a los alimentos y medicamentos de las prohibiciones ilegales.
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