En un breve comunicado emitido este viernes, el Movimiento de la Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá) ha informado que sus combatientes lanzaron la noche del jueves una andanada de drones kamikaze y múltiples cohetes BM-21 Grad contra el cuartel de Ramot Naftali, alcanzando con precisión los objetivos designados.
Ha afirmado que también llevaron a cabo una operación con aviones no tripulados (drones) contra el cuartel general del comando del Batallón al-Sahl en el cuartel de Beit Hillel y el cuartel general recién establecido de la Brigada Occidental 300 al sur del cuartel de Yaara. Además, dispararon salvas de cohetes contra una congregación de los militares israelíes en la colina de al-Tayhat.
Los combatientes también bombardearon el emplazamiento israelí de Al-Malikiya con proyectiles de artillería. Hezbolá ha declarado que realizó dichas operaciones, en respuesta a los ataques aéreos israelíes en ciudades fronterizas en el sur de El Líbano.
Hezbolá e Israel han estado intercambiando disparos letales desde principios de octubre del año pasado, poco después de que el régimen lanzara una guerra genocida contra la Franja de Gaza.
La Resistencia libanesa ha prometido mantener sus ataques de represalia, mientras el régimen israelí continúe su guerra en Gaza y agresiones contra el sur del país árabe.
Los funcionarios de Hezbolá han anunciado repetidamente que no quieren una guerra con Israel, aunque subrayado que están preparados en caso de que ocurra.
Las dos guerras israelíes libradas contra El Líbano en 2000 y 2006 se toparon con una fuerte resistencia por parte de Hezbolá, lo que dio como resultado la retirada del régimen en ambos conflictos.
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