“Si Israel nos ataca, vamos a enseñarle una lección que no olvidará”, afirmó el miércoles el vicesecretario general del Movimiento de Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá), el sheij Naim Qasem, en una entrevista con la cadena local Al-Mayadeen.
El sheij Qasem dijo que no cree que Israel ataque a la Resistencia libanesa en esta etapa, ya que, explicó, sabe bien que Hezbolá está decidido a responderle.
Con todo ello, el número dos de Hezbolá dejó claro que el movimiento no tiene intención alguna de iniciar una guerra, sino que su determinación es permanecer a la defensiva ante cualquier posible ataque del régimen sionista.
Desde la última guerra de Israel contra El Líbano en 2006, la capacidad disuasiva de Hezbolá se ha incrementado notablemente. En diciembre pasado, un experto israelí en asuntos militares alertó que el movimiento libanés cuenta con un vasto arsenal de misiles no guiados de corto y largo alcance, cientos de aviones no tripulados (drones) de combate y unos “170 000 cohetes y misiles”.
Eso mientras un informe anual del observador del régimen israelí publicado en agosto de 2020 aseveró la incapacidad de los sistemas de defensa de Israel ante ataques aéreos y con misiles.
Ante tal escenario, varios militares de alto rango israelíes han pedido a los funcionarios del régimen que dejen de escalar las tensiones con Hezbolá y otros movimientos de Resistencia, puesto que, en caso de una guerra, ciudades como Tel Aviv y Haifa, dentro de los territorios ocupados palestinos, podrían enfrentar una lluvia de proyectiles.
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