El Gobierno estadounidense quiere agregar a casi 80 empresas chinas, incluido el principal fabricante de chips del gigante asiático, SMIC, a una lista negra comercial, informó el jueves la agencia británica de noticias Reuters citando dos personas familiarizadas con el tema.
La medida se considera la última en el esfuerzo del presidente saliente de EE.UU., Donald Trump, para aplicar una política dura contra China y se produce solo unas semanas antes de que el presidente electo, Joe Biden, tome las riendas del país norteamericano.
Según la fuente, se espera que las designaciones del Departamento de Comercio nombren algunas empresas chinas que Washington dice que tienen vínculos con el Ejército chino, incluidas algunas que lo ayudaron a construir y militarizar islas artificiales en el mar de la China Meridional, así como algunas involucradas en presuntas violaciones de derechos humanos.
La Administración de Trump ha utilizado a menudo la lista de entidades, que ahora incluye más de 275 empresas y afiliadas con sede en China, para atacar industrias clave de Pekín.
Washington y Pekín mantienen focos de tensión sobre varios temas, como el comercio, la competencia tecnológica, la pandemia del nuevo coronavirus, causante de la COVID-19, y asuntos relacionados con Taiwán y Hong Kong, entre otros.
El Gobierno chino, presidido por Xi Jinping, ha denunciado las sanciones estadounidenses y ha prometido tomar contramedidas firmes por la hostilidad de Washington.
Con anterioridad, varios analistas habían advertido que existe un riesgo inminente y creciente a una “confrontación no planificada” entre Pekín y Washington, pues sus relaciones son muy tirantes.
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