“Queremos salir en algún momento, pero este no es el momento correcto”, ha declarado este martes el presidente estadounidense. Además, insiste en que la salida de las tropas estadounidenses del país árabe “es lo peor que podría pasarle a Irak”.
Las declaraciones de Trump se producen después de que el Parlamento de Irak aprobara el domingo una resolución en la que pide al Gobierno de Bagdad solicitar a Washington la salida de todas las fuerzas estadounidenses de Irak.
La resolución del Parlamento iraquí fue una respuesta al atentado perpetrado por EE.UU. en Bagdad, capital iraquí, en el que cayeron mártires el teniente general iraní Qasem Soleimani, comandante de la Fuerza Quds, del Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica (CGRI) de Irán, el subcomandante de las fuerzas populares iraquíes (Al-Hashad Al-Shabi, en árabe), Abu Mahdi al-Muhandis, y otros militares.
Esta agresión estadounidense, según diferentes Estados y expertos, viola la soberanía de Irak y el derecho internacional y aumenta las tensiones en la región. Además, la insistencia en que los uniformados estadounidenses abandonen Irak se considera una derrota para Washington y una victoria para Irán, país que ha prometido una “dura venganza” por el asesinato del general Soleimani.
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