• Un niño iraní, acompañado de su madre, recibe tratamiento en un centro médico en Teherán
Publicada: viernes, 13 de diciembre de 2019 17:30

El Gobierno de EE.UU. admite que las sanciones recientemente impuestas por Washington a Irán apuntarán a los civiles y bienes humanitarios.

“Ciudadanos estadounidenses están prohibidos de participar en transacciones que involucran las Líneas Marítimas de la República Islámica de Irán (IRISL, por sus siglas en inglés) o su filial, E-Sail, incluyendo la venta de productos agrícolas, alimentos, medicamentos o dispositivos médicos”, se lee en un comunicado publicado el miércoles por el Departamento del Tesoro de EE.UU. respecto a las sanciones impuestas el miércoles a Irán.

Además, el Tesoro de EE.UU. explica que los ciudadanos de otros países, que a sabiendas de las restricciones antiraníes se involucran en actividades comerciales con IRISL o E-Sail Shipping, con sede en China, serán castigados.

La Administración de Donald Trump anunció el miércoles nuevos embargos contra la mayor empresa naviera de Irán, IRISL, y la principal aerolínea del país persa, Mahan Air, por acusaciones infundadas de que Teherán apoya a los “terroristas” en la región.

Las nuevas medidas punitivas contra Irán están contempladas en la orden ejecutiva número 13382 y no se aplica ninguna excepción a ellas, incluyendo las de carácter humanitario. Además, estas contradicen los alegatos de EE.UU. de que ha eximido formalmente los suministros humanitarios de las sanciones contra el país persa.

Los funcionarios estadounidenses han señalado en numerosas ocasiones que las sanciones buscan dañar al pueblo iraní en un intento por obligar a Teherán a aceptar los dictados de Washington.

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En noviembre de 2018, el secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, indicó que Irán debía escuchar a Washington si quería que su gente comiera. El canciller persa, Mohamad Yavad Zarif, catalogó entonces la amenaza abierta de Pompeo de matar de hambre a la nación iraní como “un crimen contra la humanidad” y “un intento desesperado de imponer los caprichos de EE.UU. a Irán”.

Irán ha denunciado sistemáticamente las sanciones de EE.UU. como terrorismo económico, que se producen, pese a un fallo de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya que ordenó en octubre de 2018 a Washington suspender los embargos relacionados con bienes humanitarios, medicamentos y aviación civil.

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