El grupo de hackers ruso Fancy Bear, que según publica hoy miércoles la agencia estadounidense de noticias interfirió en las elecciones presidenciales de Estados Unidos de 2016, rastreó a al menos 87 personas que trabajaban en ámbitos delicados del sector militar del país como drones, misiles, cohetes y cazas furtivos, entre otros.
Fancy Bear ha creado además más de 19.000 correos electrónicos para phishing, (suplantación de identidad), con el fin de lanzar ataques cibernéticos contra los sectores de seguridad y de defensa de Estados Unidos, añade AP.
El experto en drones Kevin Gambold, que fue blanco de estos ciberataques, dice que la información recopilada por los hackers rusos puede ayudar a Moscú conseguir rápidamente el resultado de años de experiencia de Estados Unidos. “Esto les permitirá dar un gran salto adelante, anulando años de arduo trabajo nuestro”, ha indicado el experto a la agencia.
A los “osos” (significado de la palabra inglesa bear y símbolo nacional ruso) se los acusa de entrar en la cuenta de Gmail asociada a la campaña electoral de Hillary Clinton y robar correos del Partido Demócrata, lo que podría haber afectado a los resultados electorales, conduciendo a la victoria de Donald Trump.
Además, Fancy Bear ha sido acusado de atacar en la primavera de 2016 el centro de campaña electoral de Emmanuel Macron, hoy presidente de Francia. Posteriormente, sin embargo, se descartó la participación de hackers rusos y el propio pirateo se consideró “primitivo”, por lo que casi cualquier novato novato podría hacerlo desde cualquier parte del planeta.
Por el momento, los hackers de Fancy Bear están incluidos en la lista de los principales problemas de los Juegos Olímpicos de este año en Pyeongchang (Corea del Sur), según Yahoo Sports. Los expertos creen que los ciberdelincuentes están planeando publicar pruebas de dopaje en países occidentales, en respuesta a las sanciones a los atletas rusos.
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