El contralmirante Alireza Tangsiri, comandante de la Fuerza Naval del CGRI de Irán, puso de relieve que la región del Golfo Pérsico pertenece al país persa, por tanto, las fuerzas iraníes monitorean minuciosamente y mantienen un “control total” desde la entrada hasta la salida de cualquier fuerza foránea de esta zona.
“No hay diferencia entre la presencia y la ausencia de los estadounidenses en la región del Golfo Pérsico”, dijo el alto mando del Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica (GCRI), en declaraciones hechas el jueves en una entrevista con la televisión local.
El comandante iraní remarcó que Estados Unidos no tiene ningún papel que desempeñar en la región y no importa si sus fuerzas están o no, porque, “cuando los estadounidenses están en el Golfo Pérsico, los tenemos a nuestra disposición y mantenemos un control total sobre ellos y, en ese sentido, es mejor que ellos estén en esa zona”, explicó.
Tangsiri resaltó también que tanto la Armada como la Fuerza Aérea del CGRI tienen todo el Golfo Pérsico bajo su paraguas de observación e identificación, de modo que “tenemos drones en el cielo del Golfo Pérsico día y noche, y monitoreamos constantemente la región y la tenemos completamente bajo nuestro control”.
De hecho, el mando castrense iraní recordó el reciente monitoreo e interceptación de aviones no tripulados (drones) del CGRI a una flota estadounidense y señaló que la vigilancia se realiza en superficie por embarcaciones y por aire con drones.
Las Fuerzas Armadas iraníes han alertado una y otra vez que responderán a la más mínima intención de socavar la seguridad de Irán, especialmente en el Golfo Pérsico, donde Washington ha incrementado su presencia militar y ha lanzado amenazas militares contra las embarcaciones del país persa.
Ante tal coyuntura, los comandantes iraníes han subrayado que la Fuerza Naval iraní ha estado reforzando su poderío “de manera firme y constante” y ha aumentado el alcance de sus armas y misiles, para poder golpear blancos enemigos incluso en las aguas internacionales.
El miércoles, la Armada del CGRI recibió 188 aeronaves no tripuladas (drones) y helicópteros, para misiones de combate y de reconocimiento.
Las autoridades iraníes han dejado claro que no buscan una guerra con nadie, pero defenderán la soberanía del país frente a cualquier agresión, especialmente en las aguas del Golfo Pérsico que es una de las líneas rojas de Teherán.
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