“Esto es Estados Unidos, un feroz ladrón que arrebata territorios y soberanía a otros países y naciones, no contento con violar su vida y derechos por sus propios intereses”, ha señalado este miércoles la agencia estatal norcoreana de noticias KCNA través de su editorial, en el que ha insistido en que “esto no es un problema que afecte únicamente a la Franja de Gaza”.
El comentario hace referencia al polémico anuncio de Trump, en el que expresó su intención de expulsar a los residentes de Gaza, territorio devastado por la agresión genocida del régimen israelí.
El medio norcoreano ha lamentado que las pocas esperanzas de seguridad y paz de los palestinos se vean aplastadas por la propuesta de Trump. “Al mundo le hierve la sangre por la declaración bomba de Estados Unidos”, ha agregado.
En este sentido, ha destacado que las críticas provienen no solo de Palestina, Irán y otros países del suroeste de Asia, sino también de aliados occidentales de Estados Unidos. Además, ha insistido en que el carácter natural de Estados Unidos, basado en la existencia a través de masacres y saqueos, así como sus ambiciones hegemónicas y agresivas de dominación mundial, se demuestra hoy en día en Gaza.
Los pueblos del mundo recuerdan claramente quién patrocinó y fomentó las atrocidades inhumanas y vetó varias veces una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU que reflejaba la demanda de una tregua inmediata, hablando del “derecho a la legítima defensa” del régimen sionista, y quién dio a los asesinos equipo letal de última generación e invitó al criminal de guerra al Congreso para aplaudirlo, ha sostenido la KCNA.
Desde que la actual Administración estadounidense ha asumido el cargo, se ha burlado del Derecho Internacional y los principios internacionales, intentando hacer de Groenlandia parte de Estados Unidos, reclamando jurisdicción sobre el canal de Panamá y renombrando el golfo de México como golfo de América, ha destacado.
“La época actual no es la misma que la antigua, en la que los anglosajones han cruzado el mar para desarrollar Occidente a costa de exterminar a los aborígenes americanos y despojarlos de su cuna de la vida”, ha afirmado, al tiempo que ha instado a Washington a “despertar de su sueño anacrónico” y “dejar de inmediato de invadir la dignidad y la soberanía de otros países y naciones”.
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