A través de un decreto real, Muqrin y Saud al-Faisal han sido reemplazados por el ministro de Interior, Mohamad bin Nayef, y el embajador saudí en Estados Unidos, Adel al-Yubeir, respectivamente.
Según la fuente, Muqrin, que ha sido relevado también de su cargo de vice primer ministro, había renunciado a su cargo y el monarca ha decidido “aceptar su demanda”.
Respecto a Al-Faisal, que seguirá en la carrera política como consejero del rey en los asuntos exteriores, el régimen saudí alega que su destitución ha sido por motivos de salud.
En otra orden, el rey saudí ha nombrado a su hijo Mohamad bin Salman, como futuro príncipe heredero, es decir, segundo en el orden sucesorio tras el príncipe Nayef.
Aunque todavía no se sabe claramente las causas de los cambios en los puestos claves del régimen saudí, había rumores, desde cuando el monarca Salman asumió el poder, según los cuales su hijo iba a ocupar varios altos cargos.
En cualquier caso, no se descarta que la destitución del príncipe Muqrin se deba además de la lucha por el poder en Arabia Saudí, a su firme oposición con la intervención militar saudí en Yemen, iniciada el pasado 26 de marzo.
Hasta el momento, al menos 3512 personas han muerto y otras 6189 han resultado heridas en ataques saudíes, según un instituto pro derechos humanos en Yemen.
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