Luego de bloquear la votación y disolver el Parlamento la semana pasada, en un discurso televisado dirigido a la nación, Imran Jan señaló aunque que estaba decepcionado, pero acepta el fallo de la Corte Suprema del país que ordena al Parlamento proceder con un voto de censura en su contra.
La Corte Suprema de Paquistán falló el jueves contra Jan, diciendo que su decisión de disolver el Parlamento y convocar elecciones anticipadas era ilegal. Ordenó que el legislativo se reuniera nuevamente el sábado. Sin embargo, el premier instó a los paquistaníes, en particular a los jóvenes del país a manifestarse en todo el país el domingo por la noche.
Prometió no aceptar los resultados de la moción de censura del sábado, con los legisladores de la oposición diciendo que tienen los 172 votos en la asamblea de 342 escaños necesarios para derrocarlo. Dijo que quería que la Corte Suprema investigara las comunicaciones entre un alto diplomático estadounidense, a quien no nombró, y diplomáticos paquistaníes, comunicaciones que, según él, eran prueba de colusión.
Jan denuncia una “conspiración organizada por EE.UU.” para destituirlo de su cargo debido a lo que llama su política exterior independiente, su rechazo al establecimiento de bases extranjeras en el territorio paquistaní y buenas relaciones con China y Rusia. Ha calificado el plan como el “mayor crimen de la historia”.
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