“El suelo patrio se respeta. No va a poner un pie en Venezuela ni un soldado extranjero. Quien lo haga corre el riesgo de que se le responda como invasor, así de sencillo”, ha destacado este sábado el presidente de la Asamblea Nacional Constituyente (ANC) de Venezuela, Diosdado Cabello.
Cabello ha hecho estas declaraciones en la misma jornada en que el autoproclamado presidente del país, Juan Guaidó, junto con los presidentes de Colombia y Chile, Iván Duque y Sebastián Piñera, respectivamente, ha llegado al centro de acopio de la supuesta ayuda humanitaria de EE.UU. en la ciudad colombiana de Cúcuta.
Cabello ha aprovechado la ocasión para denunciar que la llamada ayuda humanitaria que Washington busca ingresar al país, a solicitud de Guaidó, no son más que “desechos”.
Ha asegurado, a su vez, que la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) hará todo su esfuerzo para defender el país bolivariano. En Venezuela “todo va a fluir en paz y tranquilidad”, añade.
El suelo patrio se respeta. No va a poner un pie en Venezuela ni un soldado extranjero. Quien lo haga corre el riesgo de que se le responda como invasor, así de sencillo”, ha destacado el presidente de la Asamblea Nacional Constituyente (ANC) de Venezuela, Diosdado Cabello.
“No vamos a caer en provocaciones, aquí hay una frontera abierta que pasan 30 mil personas de un lado para otro. No ocurre nada, no va a ocurrir nada”, señala el funcionario.
El mandatario colombiano, a pesar del cierre de fronteras ordenado por el presidente Nicolás Maduro, ha anunciado formalmente este sábado la entrega de la ayuda humanitaria a Guaidó con vistas a su entrada en Venezuela.
Guaidó, al viajar a Colombia para recibir la “ayuda humanitaria” de Washington, ha violado la prohibición de salir de Venezuela ordenada por la Justicia del país.
Maduro, quien, conforme a varias encuestas, sigue teniendo el respaldo de su pueblo, ha denunciado que Guaidó y Duque buscan ingresar al país un “caballo de Troya” y ha asegurado que el líder opositor (jefe de la Asamblea Nacional (AN) declarada en desacato en 2016 y controlada por la oposición) “tarde o temprano” tendrá que responder ante la Justicia por sus medidas golpistas.
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