“Advertimos igualmente a Washington, Londres, Bruselas (Unión Europea) y otras capitales occidentales y Kiev, que está bajo su control, que están jugando con fuego, Rusia no dejará sin respuesta semejante agresión en su suelo”, manifestó el viernes María Zajárova.
El aviso de Zajárova se produjo después de un masivo ataque del régimen neonazi de Kiev con aviones no tripulados y drones contra Crimea, la región de Krasnodar y otras regiones de Rusia los días 16 y 17 de mayo.
Conforme a la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores ruso, detrás de estos brutales ataques con armas occidentales, son claramente visibles los fantasmas de los funcionarios estadounidenses y británicos del presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski.
“No solo le suministran misiles de mayor alcance y armas pesadas, sino que también le dan luz verde para su uso contra Rusia, contribuyendo así a una mayor escalada del conflicto”, remarcó Zajárova.
Desde el comienzo de la operación militar rusa en Ucrania, iniciada el 24 de febrero de 2022, los países occidentales, encabezados por Estados Unidos, han brindado abierto respaldo a Kiev en diversos sectores, entre ellos ayuda económica y militar, lo que, según Moscú, agrava la situación entre las dos partes del conflicto y pone a Ucrania al borde de un colapso.
Moscú advierte de que la ayuda militar de Washington a Ucrania podría conducir a una “confrontación militar directa” entre Rusia y países occidentales y aumentaría el riesgo de choque directo con Rusia.
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