“La situación humanitaria en el campamento de Al-Rukban continúa deteriorándose rápidamente. Las topas estadounidense desplegadas en la región de Al-Tanf continúan impidiendo la solución de este problema, ya que toma medidas para detener a los refugiados por la fuerza allí”, aseguró el viernes el subdirector del Centro ruso para la Reconciliación de las partes en conflicto en Siria, el general de división Vyacheslav Sytnik, en un comunicado.
Agregó que “las autoridades sirias están listas para recibir a todos los ciudadanos atrapados en el campamento de Al-Rukban, garantizar su seguridad y brindarles condiciones de vida dignas”.
Este campamento está situado en la zona de Al-Tanf, donde EE.UU. mantiene una base militar sin permiso de Damasco. El campamento fue creado en la frontera sirio-jordana en 2014, después de que Amán cerrara la frontera para los refugiados sirios, bajo pretexto de razones económicas y de seguridad.
La situación en Rukban es tan critica que el Ejército ruso lo calificó de un “campo de muerte”, porque las familias residentes en ese lugar muestran signos claros de fatiga, agotamiento y mala salud debido a las terribles condiciones que soportaban en este lugar.
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