El director general del Departamento de Europa Occidental de la Cancillería de Irán, Alireza Yusefi, ha convocado este viernes el embajador de los Países Bajos, Emiel de Bont, para rechazar las declaraciones antiraníes lanzadas por un portavoz del Ministerio del Interior neerlandés y la citación del embajador iraní al Ministerio de Asuntos Exteriores del país europeo.
“Es lamentable que el aparato diplomático neerlandés simplemente haga acusaciones infundadas contra Irán basándose en ‘conjeturas’ y ‘sospechas’ inculcadas por las instituciones de seguridad del país y el régimen sionista, y posteriormente convoque al embajador iraní por esta ridícula mentira”, ha censurado Yusefi.
Asimismo, ha señalado que la acción del Ministerio de Asuntos Exteriores de los Países Bajos es una “proyección flagrante e inaceptable”, destacando que la parte que debe “rendir cuentas por albergar a criminales y terroristas con documentos de identidad no es moralmente apta para acusar a otros”.
Al pedir a la Cancillería neerlandesa que desempeñe un papel constructivo en los acontecimientos en Asia Occidental, ha instado a adoptar un enfoque profesional y respetuoso en las relaciones bilaterales con Irán, absteniéndose de repetir acusaciones falsas e infundadas y poniendo fin a su apoyo total al régimen genocida israelí.
Por su parte, Bont aseveró que transmitirá la protesta de Teherán a su gobierno.
El jueves, el Servicio General de Inteligencia y Seguridad de Países Bajos, conocido como AIVD, afirmó en su informe anual que Irán estaba detrás de dos intentos de asesinato en Europa. Por lo tanto, la Cancillería neerlandesa convocó al embajador iraní.
Ante esta coyuntura, la embajada de Irán en Países Bajos, en un comunicado, tildó de infundada cualquier participación iraní en operaciones de asesinato en Europa, asegurando que el país persa, que es la mayor víctima del terrorismo, tiene un compromiso más fuerte que cualquier otro país para combatir el terrorismo en todas sus formas.
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