“No negociaremos bajo presión ni intimidación. Ni siquiera lo consideraremos, sin importar el tema”, ha subrayado este lunes el canciller iraní en una nota emitida en su cuenta en X, en la que ha resaltado que “negociar es diferente a intimidar y emitir dictados”.
Araqchi ha remarcado el carácter pacífico permanente del programa nuclear de Irán, afirmando que fundamentalmente no existe tal cosa como una “potencial militarización”.
Al respecto, ha destacado las consultas entre Irán y los firmantes europeos del acuerdo nuclear de 2015 –Francia, Alemania y el Reino Unido– y por separado con Rusia y China que están en marcha “en igualdad de condiciones y con respeto mutuo,” con el fin de encontrar formas de generar más confianza y más transparencia en las actividades nucleares del país persa a cambio del levantamiento de las sanciones ilegales a su contra.
El máximo diplomático iraní ha aseverado que Estados Unidos gozaba del respeto de Irán en el pasado, cuando era respetuoso en su discurso, pero era confrontado cada vez que adoptaba una postura amenazante. “Toda acción obliga a una reacción”, ha agregado.
Iran's nuclear energy program has always been—and will always remain—entirely peaceful. There is fundamentally therefore no such thing as its "potential militarization".
— Seyed Abbas Araghchi (@araghchi) March 9, 2025
We will NOT negotiate under pressure and intimidation. We will NOT even consider it, no matter what the…
En una entrevista concedida el 6 de marzo a Fox News, el presidente estadounidense, Donald Trump, declaró que se puede manejar a Irán por medios militares o llegando a un acuerdo sobre su programa nuclear.
El sábado, el Líder de la Revolución Islámica de Irán, el ayatolá Seyed Ali Jamenei, señaló que la insistencia de un “gobierno matón” en mantener conversaciones con Irán no está destinada a “resolver problemas”, sino un intento de restringir el poder defensivo y la influencia regional del país, y aclaró que Irán nunca aceptaría las expectativas de potencias matones.
Las autoridades iraníes han ratificado en diferentes ocasiones que la República Islámica nunca ha intentado adquirir armas nucleares, citando el decreto emitido por el ayatolá Jamenei, que prohíbe producción de este tipo de armas.
Además, Irán ha cooperado constantemente con la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA) y ha asegurado que continuará esta colaboración para verificar el carácter pacífico de su programa nuclear.
Las autoridades iraníes han puesto de relieve que no van a negociar con Estados Unidos bajo presión ni amenazas.
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