El Líder de la Revolución Islámica de Irán, el ayatolá Seyed Ali Jamenei, ha dirigido este domingo a cientos de miles de personas que participan en el funeral de los líderes de Hezbolá, Seyed Hasan Nasralá y Seyed Hasehm Safi al-Din, en Beirut, capital libanesa. A continuación el texto del mensaje, leído por el clérigo Seyed Moytaba Hoseini, representante del ayatolá Jameneí en Irak y miembro de la delegación enviada a Beirut:
En el nombre de Dios, Clemente y Misericordioso.
“Y el poder pertenece a Dios, a Su mensajero y a los creyentes, pero los hipócritas no tienen conocimiento” (Sagrado Corán, 63:8).
El gran luchador, líder de vanguardia de la Resistencia en la región, su eminencia Seyed Hasan Nasralá (Dios eleve su jerarquía) está ahora en la cima de la gloria.
Su cuerpo puro es sepultado en la tierra de la lucha por la causa de Dios, pero su espíritu y su vía serán, Dios mediante, más reverenciados cada día, y mostrarán el camino a los caminantes.
Sepa el enemigo que la Resistencia frente a la usurpación, la tiranía y la arrogancia es inextinguible y proseguirá hasta alcanzar, con el permiso de Dios, la meta deseada.
El buen nombre y luminosa efigie de Seyed Hashem Safi al-Din (Dios esté satisfecho de él) son también una estrella resplandeciente en la historia de esta región. Él fue cercano colaborador y parte inseparable de la dirigencia de la Resistencia en Líbano.
Sea la paz de Dios y de sus siervos justos con estos dos reverenciados muyahidines y con los demás valerosos y abnegados combatientes que han alcanzado el martirio en esta etapa reciente, así como con todos los mártires del Islam.
Y mi saludo especial para ustedes, hijos queridos míos, aguerridos jóvenes libaneses.
Cientos de miles de partidarios de la Resistencia han asistido a la multitudinaria ceremonia fúnebre en Beirut. Delegaciones de 79 países han asistido al funeral, donde más de 4000 efectivos de seguridad velan por la seguridad del evento.
El exdirigente de Hezbolá, Seyed Hasan Nasralá, fue martirizado por el régimen israelí en el septiembre de 2024 en un ataque aéreo, mientras que su adjunto, Seyed Hashem Safi al-Din, cayó mártir en un bombardeo israelí en octubre.
Muchos medios de comunicación occidentales han considerado la ceremonia como una “demostración de fuerza” de Hezbolá y una advertencia para Israel.
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