El funcionario de la Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA, por sus siglas en inglés), en Rafah, en el sur de la Franja de Gaza, Georgios Petropoulos, indicó al periódico israelí Haaretz haber presenciado las consecuencias de un ataque israelí que “vaporizó” los cuerpos de las víctimas.
Conforme al relato de Petropoulos, el lugar del ataque en la localidad de Al-Mawasi, en sur de la Franja de Gaza, se parecía a Nagasaki, la ciudad japonesa donde las fuerzas estadounidenses lanzaron una bomba atómica en 1945.
“Contaron los cuerpos, pero hay gente que simplemente se vaporizó, diez o veinte personas que se sabía que estaban en las tiendas simplemente desaparecieron”, afirmó el funcionario.
Aseguró asimismo que él fue testigo de todo lo ocurrido. “Estuve en el hospital después del bombardeo. Era como un matadero, había sangre por todas partes”. No está claro exactamente a qué ataque se refería Petropoulos.
Previamente, reporteros y personal médico en Gaza también han informado anteriormente que las bombas israelíes vaporizaron los cuerpos de las víctimas.
En un ataque israelí contra Al-Mawasi en septiembre, al menos 22 personas fueron reportadas como desaparecidas, presumiblemente vaporizadas por la intensidad de la explosión.
La agencia de verificación de la agencia de noticias Al Jazeera, Sanad, concluyó que podrían haberse utilizado bombas MK-84 de 2000 libras (907 kg) de fabricación estadounidense en el ataque.
El régimen israelí ha atacado sistemáticamente en la Franja de Gaza todo tipo de sitios que albergan civiles, como escuelas, hospitales y campos de refugiados. Desde el 7 de octubre de 2023, Israel ha matado a casi 45 059 personas y ha causado heridas a otras 107 041, la mayoría mujeres y niños.
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