El exfiscal israelí Moshe Lador aseveró el sábado que los pilotos “no solo tienen el derecho, sino la obligación” de oponerse al gabinete del primer ministro Benjamín Netanyahu, que está “impulsando agresivamente y de manera intimidatoria su agenda”.
En su llamado, que se considera una de las protestas más fuertes hasta el momento contra el plan judicial de Netanyahu, alertó que al promulgarse dicha medida, el régimen se convertiría en una “dictadura”.
Lador tachó de “ilegítimas” las reformas del premier sionista, ya que privan al tribunal más alto del régimen de la capacidad de revocar decisiones adoptadas por el gabinete extremista de Netanyahu y el parlamento israelí.
Haciendo referencia a varios casos de corrupción que enfrenta Netanyahu, Lador sostuvo que el primer ministro, que impulsó el plan, tiene cargos abiertos “más severos” que su predecesor Ehud Olmert, quien fue sentenciado a prisión en 2009, tras ser declarado culpable por aceptar sobornos y obstruir la justicia.
Los detractores de la reforma judicial afirman que la medida tiene como objetivo ayudar a Netanyahu a evitar las repercusiones de sus actuales casos de corrupción. El primer ministro está siendo demandado por soborno, fraude y abuso de confianza.
Los comentarios de Lador provocaron duras críticas de Netanyahu y sus aliados. El premier israelí denunció que dichas declaraciones “merecen una condena unánime”.
“Un llamado a la negativa durante una guerra, especialmente por parte de alguien que una vez dirigió el sistema de aplicación de la ley, es cruzar la línea roja”, reaccionó criticando que la demanda de Lador “pone en peligro la democracia y amenaza nuestro futuro”.
El presidente Isaac Herzog, por su parte, advirtió de que esos llamados dañaban la “seguridad del régimen y amenazaban con reavivar la retórica divisiva que debemos dejar atrás”.
Netanyahu se enfrenta a tres casos separados de corrupción presentados en 2019: Caso 1000, Caso 2000 y Caso 4000, que incluyen acusaciones de soborno, fraude y abuso de confianza.
También está implicado en el dosier de escándalo conocido como ‘BibiLeaks’, en el que un portavoz del político y un suboficial reservista están acusados de conspirar para filtrar a la prensa extranjera un documento clasificado, con el objetivo de influir en la opinión pública contra un acuerdo de alto el fuego en Gaza.
msm/ctl/mrg