La postura de Ban se dio a conocer durante una conversación telefónica con el presidente palestino, Mahmud Abás, a raíz de los recientes enfrentamientos en la Mezquita Al-Aqsa, situada en Al-Quds (Jerusalén), entre los musulmanes palestinos y las fuerzas de seguridad israelíes.
“El secretario general y el presidente Abás intercambiaron puntos de vista sobre las recientes tensiones en Cisjordania, incluida Jerusalén. [Él] reiteró su profunda preocupación por los incidentes en Al-Haram Al-Sharif / Monte del Templo (Explanada de las Mezquitas) e instó a ambas partes a reducir las tensiones y prevenir la escalada”, dice la nota de la ONU.
Desde el pasado domingo, y tras el despliegue de soldados israelíes en la zona con motivo del nuevo año judío, los israelíes cometen brutales ataques contra la Mezquita Al-Aqsa y los palestinos. Los israelíes pretenden judaizar el recinto y eliminar su identidad islámica a fin de transformarla en un templo judío.
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