La Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA, por sus siglas en inglés) denunció el sábado que las autoridades israelíes han ordenado la demolición o la confiscación de unas 70 propiedades palestinas en la Cisjordania ocupada.
En su informe quincenal, que cubre el periodo comprendido entre el 2 y el 15 de junio, el organismo internacional aseveró que la cifra refleja un aumento de 250 % en el número de propiedades palestinas demolidas por el régimen de Israel.
Según precisó el organismo de la ONU, 61 de las estructuras palestinas destruidas y dañadas se encontraban en el Área C de Cisjordania, recogió la agencia palestina de noticias WAFA.
Otra localidad afectada fue Masafer Yata, situada en el sur de la ciudad cisjordana de Al-Jalil (Hebrón), donde Israel destruyó 17 casas y otros edificios palestinos.
La OCHA repudió, además que Israel incendiara grandes hectáreas de campos de cultivo y 90 olivos de los palestinos en Cisjordania durante el periodo mencionado.
El aumento de los actos criminales de Israel contra el pueblo palestino en la Cisjordania ocupada se produce en momentos en los que tal régimen está impulsando un plan para anexarse gran partes de esta región palestina ocupada, con el apoyo de su aliado estadounidense.
De hecho, el premier israelí, Benjamín Netanyahu, espera ejecutar la anexión del 30 % del Área C de Cisjordania, incluidos todos los asentamientos israelíes, a partir del de julio próximo, pese a que varias resoluciones internacionales rechazan la soberanía del régimen de Tel Aviv sobre los territorios ocupados desde 1967.
El plan israelí ha sido rechazado tanto por los palestinos como por la comunidad internacional, que le aseveran a Israel de las desastrosas consecuencias de este acto ilegal y arbitrario.
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