En declaraciones recogidas este sábado por los medios israelíes, Mahmud al-Habash, asesor del presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) en asuntos religiosos, ha criticado las restricciones impuestas por las fuerzas israelíes en la Explanada de las Mezquitas en Al-Quds (Jerusalén), y en la Mezquita de Al-Aqsa en particular.
El funcionario palestino ha comparado supuestas medidas “de seguridad” adoptadas actualmente por Israel contra los musulmanes en esta región sagrada con las que fueron empleadas en el siglo XII, durante la negra era de la Inquisición, y las empleadas contra los judíos en el siglo XX.
“Hay barricadas, restricciones, cierre de puertas (de la Mezquita Al-Aqsa), cierre de carreteras, hay restricciones de edad… La gente menor de 40 años no está autorizada a rezar (…) ¿En qué edad estamos viviendo? ¿En los días de la Inquisición? ¿Eso es la Inquisición o no?”, ha denunciado Al-Habash.
“Eso es una Inquisición nazista Israelí”, que está violando “la dignidad humana”, “la dignidad de las creencias religiosas” y “la fe en Dios”, ha matizado.
Hay barricadas, restricciones, cierre de puertas (de la Mezquita Al-Aqsa), cierre de carreteras, hay restricciones de edad… La gente menor de 40 años no está autorizada a rezar (…) ¿En qué edad estamos viviendo? ¿En los días de la Inquisición? ¿Eso es la Inquisición o no?”, ha denunciado Mahmud al-Habash, asesor del presidente palestino, Mahmud Abás, en asuntos religiosos.
Las autoridades y formaciones palestinas advirtieron en abril pasado del peligro que corre la Mezquita Al-Aqsa debido a la conspiración israelí para degradar y judaizar el recinto, obviando la importancia que reviste el lugar para toda la comunidad musulmana.
En las últimas décadas, el régimen israelí ha hecho lo imposible para financiar y lograr cambiar la composición demográfica de Al-Quds y acabar con su identidad islámica mediante la construcción de asentamientos ilegales, la destrucción de sus lugares históricos y la expulsión de la población palestina.
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