El espía —arrestado el domingo— es un taxista palestino de 37 años de edad que estaba realizando tareas de seguimiento a responsables de HAMAS durante las maniobras militares que realizaba ese día el movimiento palestino.
Según HAMAS, el espía había recibido instrucciones de un agente del espionaje israelí para desalentar la participación de los gazatíes en la manifestación masiva que se celebrará este viernes 30 de marzo con motivo del Día de la Tierra Palestina.
Para ello, el Shin Bet habría encomendado al detenido divulgar rumores y hablar contra la manifestación a los clientes que se subieran a su taxi, de acuerdo con las explicaciones de las fuerzas de seguridad.
El movimiento palestino recordó a primeras horas de este miércoles que el objetivo principal de la manifestación del viernes es promover el derecho al retorno de los palestinos desplazados desde la partición de Palestina.
El régimen de Tel Aviv espía de distintas maneras a los palestinos. En febrero, HAMAS halló una microcámara espía israelí escondida en la asediada Franja de Gaza dentro de una roca, en un área que es habitualmente escenario de enfrentamientos entre manifestantes palestinos y soldados del régimen sionista.
Un informe publicado en 2017 por el Centro Árabe para el Avance de los Medios Sociales sacó a la luz la profundidad del espionaje a los palestinos desde los territorios ocupados, señalando en particular el espionaje mediante las redes sociales.
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