Publicada: domingo, 1 de diciembre de 2024 23:37

Tras el alto al fuego israelí en Líbano el 27 de noviembre, los residentes del sur y otras zonas afectadas pudieron regresar a sus hogares.

 
Por: Ghadir Khumm *

 Después de la cesación de las hostilidades israelíes en Líbano con un alto al fuego el 27 de noviembre, los residentes del sur de Líbano, junto con los de otras regiones afectadas, finalmente pudieron regresar a sus hogares.

Sin embargo, algunas aldeas y pueblos fronterizos han sido clasificados como áreas de “alto riesgo” debido a preocupaciones de seguridad aumentadas, lo que hace que permanezcan inaccesibles por el momento.

Incluso ha habido informes sobre las fuerzas de ocupación israelíes apostadas en la frontera, abriendo fuego contra los libaneses que intentaron regresar a sus hogares tras el alto al fuego.

Mientras tanto, el alto al fuego en Líbano coincidió con el aumento de la agresión violenta en el oeste de Alepo, donde el Ejército Árabe Sirio se encuentra actualmente enfrentándose a los terroristas takfiríes respaldados por Israel, erróneamente descritos en los medios de comunicación principales como “rebeldes” sirios.

Estos grupos terroristas, que operan en Siria bajo el paraguas de Hayat Tahrir al-Sham (HTS), anteriormente conocido como Frente Al-Nusra, cuentan con el apoyo del régimen israelí y de las potencias occidentales, y representan una dinámica geopolítica más amplia en juego.

La reciente y vergonzosa derrota de la entidad sionista en el sur de Líbano, tras casi 70 días de agresión desenfrenada y marcada por su incapacidad para penetrar el territorio libanés debido a las hábiles maniobras militares del Movimiento de Resistencia islámica de El Líbano (Hezbolá), obligó a una recalibración estratégica.

Para salvar su imagen ya destrozada, el régimen israelí ahora está abriendo nuevos frentes de guerra, con el objetivo de interrumpir las cadenas de suministro críticas que facilitan el traslado de armas hacia la resistencia libanesa.

Esta escalada sigue a una advertencia contundente del primer ministro de la entidad sionista, Benjamín Netanyahu, al presidente sirio Bashar al-Asad, diciéndole: “Estás jugando con fuego”.

La declaración de Netanyahu, hecha tras el alto al fuego en Líbano y su reconocimiento de derrota frente a Hezbolá, hace referencia directamente al crucial papel de Siria en el apoyo al Eje de la Resistencia.

El papel de Siria en el Eje de la Resistencia

Siria desempeña un papel crucial dentro del Eje de la Resistencia, siendo un apoyo clave tanto para Hezbolá como para las facciones de la Resistencia palestina, facilitando la transferencia de armas y recursos.

Más allá de sus contribuciones logísticas, Siria también alberga instalaciones de investigación críticas en la ciudad de Alepo, lo que subraya su importancia estratégica para la red de Resistencia más amplia. Además, Siria sigue siendo un estado en la línea de frente en la lucha contra los proxis respaldados por Occidente, que buscan tomar el control de Alepo y socavar al gobierno democráticamente electo de Bashar al-Asad en Damasco.

Estas dinámicas destacan el papel dual de Siria, tanto como un centro logístico como un actor firme en la resistencia a los intentos externos de desestabilizar la región.

Los depósitos de armas de Siria, que consisten en armas fabricadas localmente, así como suministros adquiridos de otros países, han sido fundamentales para apoyar las operaciones de Hezbolá en Líbano.

Durante la última década, las instalaciones de investigación sirias y los centros científicos dedicados al desarrollo de armas han sido repetidamente objetivo del enemigo.

Esto ha incluido ataques aéreos a sitios estratégicos y los asesinatos selectivos de personal clave involucrado en la coordinación de la transferencia de armas. En las últimas semanas, estos ataques se han intensificado, lo que señala un esfuerzo deliberado por debilitar la infraestructura militar de Siria y su papel en el sostenimiento de la Resistencia.

Al mismo tiempo, las fuerzas de Resistencia están posicionadas en Alepo para contrarrestar la creciente amenaza de los proxys respaldados por el enemigo en el norte de Siria. Estos proxis intentan sobreextender la Resistencia y cortar las rutas de suministro esenciales, lo que ilustra aún más la naturaleza interconectada de la guerra regional.

¿Por qué Siria se abstuvo de entrar en la guerra?

El argumento de que Siria no entró en la guerra contra el régimen sionista se basa en las complejas realidades de sus circunstancias internas y regionales.

Siria se abstuvo de involucrarse directamente junto a Hezbolá o las facciones de la Resistencia palestina porque está profundamente involucrada en sus propias batallas internas, combatiendo fuerzas terroristas dentro de sus fronteras. A pesar de esto, Siria ha seguido siendo un proveedor crítico de armas para el frente de Resistencia.

Por ejemplo, cuando Hezbolá atacó la base aérea israelí de Tel Nof, utilizó una versión modificada del Sistema de Lanzamiento Múltiple de Cohetes (MLRS) sirio M-302 Jaibar-1 de 302 mm, con un alcance declarado de hasta 225 km, denominado “Fadi-6”.

Esta adaptación, proporcionada por Siria, incluyó la extensión del alcance del cohete y la reducción del peso de la ojiva, resultando en un peso total de 650 kg y una ojiva de 140 kg.

Además, un vídeo militar publicado por Hezbolá el 3 de noviembre destacó sus instalaciones subterráneas y reforzó su compromiso con la Resistencia.

“No dejaremos el campo de batalla... No dejaremos nuestras armas”, se afirmaba en el vídeo.

Las imágenes mostraron cohetes “Fadi-4”, derivados del Jaibar-1 sirio, junto con carabinas AKS-74U, lo que demuestra aún más las contribuciones de Siria al arsenal de la Resistencia libanesa.

También se han realizado repetidos descubrimientos de armas por parte de las fuerzas de ocupación israelíes durante su infiltración en almacenes y edificios en el sur de Líbano. Entre estos hallazgos se encontraban armas de origen ruso, previamente identificadas como utilizadas por el Ejército Árabe Sirio.

Estos descubrimientos subrayan aún más la profunda implicación de Siria y su apoyo inquebrantable a Hezbolá, demostrando la magnitud de su compromiso con la Resistencia.

 Ofensivas terroristas de Israel en Siria (2022-2024)

Entre 2022 y 2024, las agresiones de Israel en Siria se centraron principalmente en desmantelar las defensas aéreas del país, sus sistemas de radar y sus instalaciones de investigación militar.

Israel apuntó sistemáticamente a componentes críticos de la infraestructura militar de Siria, incluidos los centros de investigación científica, los laboratorios de defensa y los depósitos de armas. Estos sitios son esenciales para el desarrollo militar de Siria y sus capacidades estratégicas.

A principios de noviembre de 2024, por ejemplo, Israel lanzó un ataque contra una instalación de investigación científica y laboratorios de defensa del Ejército Árabe Sirio cerca de Al-Safira, en los alrededores de Alepo.

Estas instalaciones no solo son puentes críticos para la transferencia de armas, sino que también son fundamentales para el papel más amplio de Siria en el apoyo a la Resistencia. Los centros de investigación científica, los laboratorios de defensa y las instalaciones de fabricación militar de Siria forman la columna vertebral de sus capacidades defensivas, permitiendo la producción de armas que van desde balas hasta misiles y artillería.

La humillación en Líbano alimenta la violencia de los proxis sionistas en Siria

Las recientes acciones del régimen israelí pueden caracterizarse como derrotistas, reflejando su reconocimiento de haber perdido la guerra en Líbano contra la Resistencia libanesa antes incluso de que comenzara.

Sus escaladas en Siria no solo son intentos por recuperar alguna semblanza de control, sino que también buscan socavar las capacidades de Resistencia de Hezbollah.

Sin embargo, el Ejército de Siria sigue firme en su defensa del pueblo sirio y en su apoyo al Eje de la Resistencia. Los combatientes por la libertad en Siria están profundamente leales al presidente Bashar al-Asad e inspirados por el martirio de líderes icónicos como Seyed Hasan Nasralá (exlíder mártir de Hezbolá).

Durante la última década, Siria ha reforzado significativamente la Resistencia en Líbano, incluyendo avances en tecnología de drones y misiles para Hezbolá.

Paralelamente, una intensa campaña de propaganda contra el Ejército sirio está en pleno auge, similar a las lanzadas contra el país árabe desde 2011.

Estos esfuerzos tienen como objetivo delegitimar el papel de Siria en el Eje de la Resistencia y debilitar su influencia.

Sin embargo, la historia demuestra que cuando un eneamigo recurre a estas estrategias tras una derrota, a menudo es solo cuestión de tiempo antes de que enfrente otro fracaso.

La resiliencia de Siria y sus alianzas estratégicas continúan frustrando los intentos del régimen de Tel Aviv por desestabilizar la región, y la lucha por una Palestina liberada sigue su curso.

*Ghadir Khumm es estudiante universitaria en Canadá, cursando una maestría. Se especializa en estudios postcoloniales, dedica su tiempo a las relaciones internacionales y elabora análisis políticos perspicaces sobre los problemas globales.


Texto recogido de un artículo publicado en Press TV.